El candidato y el Gobierno cuestionan las consideraciones jurídicas del 'caso Faisán'

Tanto el candidato socialista a las próximas elecciones generales, Alfredo Pérez Rubalcaba, como el ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, han cuestionado hoy las consideraciones jurídicas del juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz en el auto del caso Faisán. El juez investiga el chivatazo que alertó al propietario del bar Faisán, que formaba parte de la trama de cobro de la extorsión etarra, de una operación policial inminente contra esa trama. El nuevo ministro de Interior, Antonio Camacho, ha declinado, sin embargo, opinar sobre el tema.

Preguntado en una entrevista en RNE por la acusación por colaboración terrorista a los tres mandos policiales imputados en el caso, Rubalcaba ha señalado que hay argumentos para entender que la causa tiene "fallos jurídicos". El candidato ha declinado, no obstante, entrar en este asunto que le llevaría a una "deriva judicial". "Ese no es mi tema", ha zanjado, aunque sí ha hablado sobre la utilización partidista del caso por parte del Partido Popular. "Si existe hoy más nunca [el caso Faisán] es porque yo soy el candidato", ha asegurado.

El ministro de la Presidencia sí ha hablado más sobre el asunto. Jáuregui ha calificado de "disparatado" el auto de procesamiento del juez Ruz, porque a su juicio "probablemente es una suma de indicios más bien especulativos". Por esa razón, ha apuntado, tiene "la firme convicción de que será revocado". 

"No puedo creer que personas que llevan toda la vida luchando contra el terrorismo y que tienen el honor de ser, incluso, víctimas de la violencia, puedan ser acusadas de colaborar con el terrorismo", ha añadido el ministro en declaraciones antes de una Escuela de Verano de la Universidad Católica de Ávila.

Antonio Camacho, que el martes tomó posesión como ministro de Interior en sustitución de Rubalcaba, ha manifestado que como responsable de ese departamento, su cargo le impide pronunciarse sobre el tema. "Ni puedo ni debo hacer ningún tipo de declaración sobre un asunto que se está investigando judicialmente", ha dicho a la prensa.

Rubalcaba ha remarcado que no tiene "nada que esconder de su vida política, absolutamente nada". Y ha insistido en que "todos los terroristas del caso Faisán están detenidos y procesados". La portavoz del PP en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, pidió ayer que el candidato comparezca ante la opinión pública para dar explicaciones a pesar de que no su nombre no aparece en el auto del juez. Sáenz de Santamaría considera que el caso inhabilita a Rubalcaba como candidato.

En la tarde del jueves Mariano Rajoy ha señalado que Rubalcaba es "libre de hacer lo que quiera", pero ha recordado que su obligación es dar "explicaciones", al tiempo que ha avanzado que las pedirá "durante mucho tiempo". Según Rajoy, el caso constituye "un hecho muy grave, impropio de una democracia avanzada", aunque ha manifestado su "respeto absoluto" por las decisiones judiciales, "gusten o no gusten".

El exministro ha asegurado esta mañana que no sabía nada de los tres policías que van a ser juzgados porque solo llevaba "unas semanas" en el cargo. El candidato ha ido más allá y ha manifestado su convencimiento de que, si él no hubiera sido el ministro de Interior en el momento en el que se produjeron las detenciones, "no habría caso".

El líder socialista también se ha referido a su sucesor en Interior, Antonio Camacho, que por entonces era su número dos en el departamento y al que el Partido Popular también le atribuye haber participado en el caso. "El problema no es Camacho, es Alfredo P. Rubalcaba. Si me hubiese ido hace cinco años y no fuese candidato, ahora al PP no le importaría ese tema", asegura. El exministro ha recordado que los populares tienen especial interés político en el caso porque "está personado en la causa" y que el juez no consideró necesario siquiera que Camacho testificase como testigo.

En lo mismo ha ahondado Manuel Chaves, vicepresidente segundo del Gobierno para Política Territorial, respondiendo a preguntas de la prensa, en Huelva. El vicepresidente ha remarcado que ni Camacho, ni su predecesor en el cargo, "aparecen en la resolución judicial", y ha hecho hincapié en la importancia de tener en cuenta la presunción de inocencia para estos tres ex dirigentes de la cúpula policial de Interior, los cuales "han curtido su vida profesional luchando contra el terrorismo vasco". Chaves opina que los ataques del PP a Rubalcaba a cuenta del caso Faisán responden al "temor" de Rajoy.

Lucha antiterrorista

El candidato del PSOE ha reiterado esta mañana que no utilizará los éxitos alcanzados en política antiterrorista durante la campaña y ha ironizado con que "algunos" parecen tener "miedo" de que se utilice este argumento en su camino para llegar a la Presidencia del Gobierno.

Rubalcaba ha recordado, sin embargo, los avances que se han producido con el fin de debilitar a ETA. "La gente no se da cuenta, pero hace dos años que no hay ningún atentado, ni kale borroka, ni impuesto revolucionario", ha destacado. El candidato socialista no ha querido personalizar los pasos que se han dado sino que ha asegurado que se trata "de un trabajo de equipo, de las Fuerzas de Seguridad del Estado".

Aunque su vida ha cambiado, según ha contado, al dejar el Ministerio, porque tiene "mucha menos presión", Rubalcaba reconoce que Interior "engancha" por la intensidad del trabajo y ha elogiado la labor de las fuerzas de seguridad del Estado. "Siempre les he defendido [a la Guardia Civil y la Policía] porque me he sentido culpable de cosas que les han pasado", nimiedades, dice, que se han destacado por ser él el ministro.