IU aprueba un código ético que obliga a dimitir a "imputados y procesados"

Con la inevitable ausencia de su candidato a alcalde de Sevilla, Antonio Rodrigo Torrijos, imputado por el caso Mercasevilla, la dirección de IU y una treintena de cabezas de lista a las elecciones del 22-M realizaron ayer en Madrid una firma solemne de su nuevo código ético. "No todos los politicos somos iguales. Nosotros somos distintos", subrayaron.

"Aún no tenemos el auto [de imputación]. Es pronto. Es un caso serio, respetaremos a la justicia. Yo tengo plena confianza en nuestros cargos públicos en Sevilla", leyó Cayo Lara, tras afirmar que se siente "orgulloso de coordinar una organización de hombres y mujeres honestos y honestas" y asegurar que el código "no sera papel mojado, como otros". El texto obliga a dimitir a los cargos públicos en caso de "imputación y procesamiento por delitos de corrupción política y urbanística". Un portavoz de IU argumentó que "imputación y procesamiento" quiere decir "procesamiento", porque "la imputación, a veces, no es más que un paso previo que luego queda en nada".

Otros compromisos son: exigir la regulación por ley de los sueldos de los concejales; una "declaración explícita de conflicto de intereses" de quien participe en adjudicaciones de obras; la prohibición de recibir regalos personales; la incompatibilidad total con actividades privadas; y la renuncia a aliarse con tránsfugas.