_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

El apareamiento homosexual y Milei

El presidente argentino es el premiado número 17 del Instituto Juan de Mariana, todos ellos hombres. Un vistazo a su web es iluminador

Berna González Harbour

Como es sabido, no hay sobre la faz de la tierra mujeres destacadas en la lucha por la libertad, si hacemos caso a los premios que concede el Instituto Juan de Mariana, que este año ha decidido distinguir a Javier Milei por sus aportaciones a la causa. El presidente argentino prevé volver a Madrid en junio para recibirlo y no es descartable que de nuevo pase la factura a su maltrecho erario público, como en su viaje reciente para azuzar a Vox e insultar a Pedro Sánchez. Luchar tan denodadamente por la libertad es una cosa, pagarlo de su bolsillo es otra.

El esfuerzo de buscar a esas mujeres libertarias —si lo hubo— fue en vano, a juzgar por la lista de los 17 galardonados por su “defensa ejemplar de las ideas de la libertad” hasta la fecha: todos ellos hombres, incluidos tan destacados amantes de la verdad como Federico Jiménez Losantos.

Al Instituto Juan de Mariana le ocurre como a la CEOE: para sus mejores fotos solo encuentra hombres, lo cual en este caso viene a ser un alivio. Duele la foto tan masculina con el adalid de la libertad, carajo, pero más habría dolido ver a empresarias en tal compañía. Carajo.

Cuando un tema da mucho que hablar, lee todo lo que haya que decir.
Suscríbete aquí

Un vistazo rápido a la web de este instituto es iluminador: encontraremos una extraña diatriba sobre la homosexualidad, “un fenómeno que continúa generando algunas controversias políticas” y en la que el autor se pregunta “de qué sirve el apareamiento sin reproducción”; hallaremos un artículo titulado Begoña Gómez, crimen y castigo; y otro, El fraude Karl Marx (IV). Lo que me recuerda una cita de Milei cuando, preguntado en noviembre por la homosexualidad, aseguró que “si querés estar con un elefante, es un problema tuyo y del elefante”.

Lo más nocivo de la visita de Milei no ha sido su desprecio del socialismo que votan legítimamente millones de personas en España y que él considera cancerígeno; o del presidente del Gobierno y del Rey, a quienes ni siquiera pidió saludar. Sino la contaminación de su discurso contra la justicia social, esencia de nuestro Estado de bienestar y de sobra recogida en el espíritu de la Constitución cuando, en su Artículo 1, define a España como un “Estado social y democrático de Derecho que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político”.

En la estela de Milei no solo está Vox, sino Isabel Díaz Ayuso, que también agita la bandera contra la justicia social al asegurar que es “un invento de la izquierda que promueve la cultura de la envidia y el rencor”. Lo grave de la ultraderecha, ya sabemos, es lo rápido que contagia a la derecha.

El año que viene, al menos, el proverbial Instituto podrá premiar a una mujer.

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Sobre la firma

Berna González Harbour
Presenta ¿Qué estás leyendo?, el podcast de libros de EL PAÍS. Escribe en Cultura y en Babelia. Es columnista en Opinión y analista de ‘Hoy por Hoy’. Ha sido enviada en zonas en conflicto, corresponsal en Moscú y subdirectora en varias áreas. Premio Dashiell Hammett por 'El sueño de la razón', su último libro es ‘Goya en el país de los garrotazos’.
Tu comentario se publicará con nombre y apellido
Normas
Rellena tu nombre y apellido para comentarcompletar datos

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_