Reenviado muchas veces
La desinformación vuela por el mundo sin límites físicos ni tecnológicos e irrumpe en los círculos más íntimos, de la mano de las personas que más quieres
Hace algunos días, aterrizó en mi teléfono móvil un vídeo inquietante. Mostraba el funcionamiento de un dron diseñado específicamente para provocar fuego. El aparato disponía de un contenedor que alojaba decenas de esferas del tamaño de una pelota de pimpón. El dron las dejaba caer en la posición elegida, y al tocar el suelo, se encendían como si fueran cerillas. El vídeo, extraído de una cuenta de TikTok, estaba editado y locutado por el usuario @amaurysflores, para quien las cosas estaban claras: “Ellos están incendiando todo, así han provocado los fuegos en España, Francia y Portugal. Y estos hipócritas diciendo que es el calentamiento global”. La denuncia del amigo Amaurys, un campesino dominicano, según el mismo relata en el vídeo, consiguió cruzar el Atlántico y, saltando de red social en red social y de grupo en grupo de WhatsApp, alcanzó el norte de África, desde donde uno de mis familiares directos, lo compartió en el chat familiar con este comentario: “No dejéis de leerlo, es interesante”, acompañado de tres iconos de hombrecito encogido de hombros.
Así de poderosa es la desinformación: vuela por el mundo sin límites físicos ni tecnológicos e irrumpe en los círculos más íntimos, de la mano de las personas que más quieres. Con frecuencia son nuestros seres queridos de más edad deseosos de compartir una inquietud, una duda o alertar de un peligro inexistente al resto de la tribu. Queda ahora buscar la manera de decirles sin ofenderles que la realidad es otra. El negacionista Amaurys ha recuperado las imágenes de demostración de Ignis, un sistema de control de incendios con fuegos controlados por dron desarrollado por dos profesores de ingeniería de la Universidad de Nebraska-Lincoln. El autor del bulo ha editado el material original para integrarlo en un pastiche de rótulos, imágenes recortadas y una locución que avisa a la humanidad de un complot para que arda la Tierra entera.
Los “reenviados muchas veces” de WhatsApp se han convertido en uno de los principales quebraderos de cabeza para los organismos de verificación y periodistas, porque la desinformación circula masiva y privadamente y combatirla en su totalidad es como poner puertas al campo: un imposible. Una circunstancia que políticos y partidos de corte populista aprovechan para integrar la mentira como una potente y eficaz herramienta en la conquista del poder. El maestro de la desinformación en WhatsApp es Jair Bolsonaro. Hace cuatro años, accedió a la presidencia de Brasil a lomos de una histórica campaña que explotó todas las posibilidades que para la difusión del engaño alberga un canal de mensajería como WhatsApp. 146 millones de brasileños tienen instalada esta aplicación en su móviles.
Bolsonaro quiere jugar la misma baza para ser reelegido el próximo otoño, pero encuentra ahora algunas piedras en el camino. La prensa ha aprendido a detectar y dejar al descubierto sus bulos, como el del supuesto apoyo del actor Tom Cruise que circula estos días. Además, el Tribunal Superior Electoral trabaja estrechamente con las grandes tecnológicas para frenar la circulación de noticias falsas.
La Fiscalía brasileña ha pedido a WhatsApp que retrase hasta el año que viene la puesta en marcha de “Comunidades”, una herramienta que amplía la posibilidades de difusión de mensajes dentro de los grupos. Temen que la desinformación sobre la legalidad del recuento estalle en WhatsApp si Bolsonaro pierde las elecciones, con el consiguiente riesgo para la estabilidad democrática del país.
NO AR. É falso que Tom Cruise manifestou apoio a Bolsonaro em vídeo https://t.co/HD7qxFQyXF pic.twitter.com/uA9wZSLSIv
— Aos Fatos (@aosfatos) August 7, 2022
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