De políticos y ciudadanos

¿Qué hemos hecho para padecer esta política?, se pregunta la ciudadanía, haciendo recaer la responsabilidad de todo lo que va mal en los políticos. La respuesta es sencilla: como mínimo, les dimos nuestros votos. Creo que nada mejoraremos si, al modo de lo que critica Daniel Innerarity en su tribuna publicada en EL PAÍS el pasado 15 de marzo, los ciudadanos actuamos como si nuestro propio comportamiento nada tuviese que ver con el de “la clase política”. Como si fuésemos superiores moralmente por el solo hecho de no ser políticos. La política en una democracia la hacemos todos.

Miguel Vázquez Freire. Santiago de Compostela (A Coruña)

Democracia: espacio compartido

Cuando los sentimientos y las emociones sustituyen a los hechos, la democracia se resiente. Si los políticos solo discuten y tensionan lo que se daña es la convivencia. La democracia es un espacio compartido donde caben opiniones diferentes y verdades intermedias. La política no debe ser entendida en función de amigo/enemigo porque la democracia no necesita enemigos, sino adversarios con los que confrontar ideas. Sería bueno que nuestros representantes se dieran cuenta de que la política es una herramienta de transformación, pero para eso es necesario que se escuchen y dialoguen. No creo que lo hagan.

Oliver Campo Mateos. Madrid

El tercer ojo

Charlando con mi suegra, que tiene 78 años, sobre los pros y los contras de la vacuna de la covid-19, cuál experta viróloga —que no es—, ella me dice que quiere ponerse la de Pfizer, que le da más confianza... Parece que, gracias a todos aquellos negacionistas que circulan por internet, ha decidido que si le tocara la de Moderna, podrían llegar a manifestarse en ella efectos secundarios de magnitud tan enorme que bien cabría pensar que la aparición de un tercer ojo podría producirse más pronto que tarde. Desde aquí, ruego encarecidamente que tengan en cuenta a todos, pero especialmente a nuestros mayores, pero de verdad. El miedo es un gran enemigo que la soledad agudiza y la difusión de teorías conspiranoicas o negacionistas no hace más que alimentarlo.

Ibán Moncholí Villalba. Marbella (Málaga)

Partido verde

Vivimos tiempos turbulentos e inciertos. Precisamos de soluciones en el tiempo que nos permitan volver a cierta tranquilidad en todos los sentidos. La pandemia que sufrimos ha acelerado procesos de transformación, como es el caso de la digitalización. Lo cierto es que la sociedad no está en su totalidad preparada para este cambio. Tampoco está preparada la clase política, que sigue con el mismo discurso del pasado. Países como Alemania donde los Verdes ya son la segunda fuerza del Estado, nos hacen ver, que el tema medioambiental ha venido para quedarse. Francia es otro país donde los ecologistas son de las primeras opciones políticas. España no tiene un partido verde con gran representación. Son tiempos de cambios y de nuevas mentalidades. Necesitamos frescura y nuevos aires en la política de nuestro país. Esperemos, que en la pospandemia, asistamos al nacimiento de un partido verde importante en sintonía con lo que está pasando en Europa.

Pedro Marín Usón. Zaragoza

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