Quien juega con fuego...
Donald Trump no acepta el resultado de las elecciones 2020. Declara, denuncia, sin pruebas concluyentes, que las elecciones han sido un fraude en algunos Estados —curiosamente, en los que él no ha ganado—. Accedió a la Casa Blanca, en 2016, tras una campaña turbia-polémica. Utilizó fake news y correos de Hillary Clinton filtrados por Wikileaks. Hay pruebas, según informes oficiales de EE UU, de la interferencia de Rusia a favor de Trump en la campaña. Ahora continúa con su estrategia de caos e incertidumbre. Sabe que mientras sea presidente la Justicia no puede juzgarle por delitos fiscales. Pero quien juega con fuego, al final se quema.
Juan Pedraza. Madrid
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.