_
_
_
_
Editorial
Es responsabilidad del director, y expresa la opinión del diario sobre asuntos de actualidad nacional o internacional

Cultura sin rebrotes

Suspender actividades culturales sin razones sanitarias justificadas puede agravar la del sector

La sala 1 del cine durante una proyección.
La sala 1 del cine durante una proyección.Joan Sánchez

Ante los recientes repuntes de la covid-19, las Administraciones autonómicas están dando pasos atrás en esta nueva normalidad, extraña de por sí, instaurada desde junio. En Cataluña, la preocupante extensión del rebrote llevó a la Generalitat a prohibir numerosas actividades, entre las que se incluyeron espectáculos culturales a los que se equiparó con locales de ocio nocturno. Finalmente se rectificó la decisión tras las protestas.

Ninguno de los focos de coronavirus detectados estas semanas ha tenido su origen en un acto cultural. Ir al cine, al teatro, a un concierto o a un festival de literatura se ha convertido en una experiencia repleta de restricciones destinadas a garantizar la seguridad sanitaria de artistas, trabajadores y asistentes. Mascarillas, higienización, distancia de seguridad, a veces toma de temperatura: la experiencia cultural es tan o más segura que viajar en tren o en avión.

El sector se ha tomado estrictamente el cumplimiento de los protocolos pactados con las Administraciones teniendo en cuenta la importancia que tiene ofrecer garantías sanitarias para la propia supervivencia de la industria. El impacto de la parálisis causada por el estado de alarma en el tejido cultural ha sido profundamente dramático. Hablamos de un sector frágil, con empleos discontinuos e incertidumbres permanentes, que tuvo que añadir las dificultades para ajustarse al marco estándar diseñado por el Gobierno para conceder ayudas.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Suspender actividades culturales sin razones sanitarias justificadas puede agravar la situación. Supone además una doble penalización: por un lado estigmatiza a la cultura, y por otro cercena una vía de conocimiento y evasión para los ciudadanos, que fue sin embargo esencial para su bienestar durante los largos días de confinamiento. Convendría que las Administraciones públicas, a la hora de decretar futuras limitaciones para garantizar la salud de todos, no incluyeran en el mismo cajón la cultura y el ocio nocturno.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_