Albrecht Weinberg, superviviente de Auschwitz: “Todo puede volver a ser como en los años treinta”
A los 99 años, y tras haber sobrevivido a tres campos de concentración, este ciudadano decidió devolver la Cruz Federal al Mérito de Alemania tras la sacudida política que provocó la unión de la derecha y la ultraderecha de AfD contra la migración
![Albrecht Weinberg superviviente de Auschwitz](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/2OJS4Y6H6VBKPFAROQHFT6C7VQ.jpg?auth=e44f0d6316bef40d1aabf222178a5d0c697a9e67d3794c8d36daa3192ffcab36&width=414)
Albrecht Weinberg tenía 18 años cuando los nazis lo deportaron a Auschwitz, en 1943. Sobrevivió a tres campos de concentración y finalmente fue liberado en el campo de Bergen-Belsen. Sus padres y casi toda su familia fueron asesinados en el Holocausto. En 2012 regresó junto con su hermana de Estados Unidos a Leer, una pequeña localidad en el norte de Alemania y desde entonces no ha parado de educar a los estudiantes alemanes sobre lo ocurrido en el pasado, lo que le valió en 2017 la Cruz Federal al Mérito de Alemania. Ahora, a punto de cumplir 100 años, reconoce estar conmocionado por la decisión del líder cristianodemócrata, Friedrich Merz, de aceptar el apoyo de la extrema derecha para intentar sacar adelante un paquete de medidas contra la inmigración. En conversación telefónica con EL PAÍS, desde su casa, alerta del peligro que supone dar espacio a la extrema derecha.
Pregunta. ¿Qué sintió cuando se enteró de la votación en el Parlamento alemán de la Unión Cristianodemócrata (CDU) con los ultras la semana pasada?
Respuesta. Nací en Alemania. Y me costó mucho lidiar con lo que los nazis nos hicieron a los judíos. No puedo olvidar el pasado. Mi familia fue asesinada. ¿Cómo puedo olvidarlo? Y ahora los políticos se han unido a los derechistas, como se les llama, a los nazis y a los extremistas de derecha. Es terrible. Yo viví esa época, toda mi familia fue asesinada por política o por religión, y es increíble que hayamos vuelto a esto. Solo han pasado poco más de 10 años desde que volví a Alemania y hablo con los estudiantes, con los escolares, sobre lo que podría pasar si no tienen cuidado cuando cumplan 18 años y puedan votar. ¿Qué sería de ellos? ¿Qué podría pasar? Si a esa gente les das la mano, te toman el brazo y todo puede volver a ser como en los años treinta.
P. ¿Y qué pensó cuando finalmente el viernes se rechazó el proyecto de ley contra la inmigración a pesar del apoyo de AfD?
R. Pensé que todavía había esperanza, sí. A ver, no es que me vayan a meter en la cárcel, pero es una democracia al borde del colapso. Y en mi libre albedrío me pregunté si quería seguir teniendo la Cruz Federal al Mérito. La recibí en 2017 porque hablo con los jóvenes en las escuelas. Pero ahora creo que no podría llevarla colgada en la chaqueta después de que se comportaran así y cooperaran.
P. Después de anunciar que quiere devolver la Cruz Federal al Mérito, la oficina del presidente federal de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, se puso en contacto con usted, ¿sabe cuándo se reunirán?
R. No sé cómo funciona. Nunca me había pasado querer devolverla. El presidente federal está fuera del país en un viaje de trabajo y estoy esperando una llamada. Quería hacerme saber que le gustaría hablar conmigo personalmente. Aunque oficialmente no sé cuándo va a tener lugar la conversación. Además, hay que tener en cuenta que tengo una edad en la que no estoy tan en forma como antes. No podría ir a Berlín o no querría ir.
P. ¿Y cree que después de esa conversación todavía va a querer devolverla?
R. Sí, lo tengo decidido. Voy a devolver la Cruz Federal al Mérito, porque los políticos han unido fuerzas con los extremistas de derecha. Y entonces será como con los nacionalsocialistas y Hitler. No en este momento, pero si meten el pie en la puerta, entonces pueden meter después todo el cuerpo.
P. Miles de personas salieron a las calles la pasada semana para protestar contra lo ocurrido en el Bundestag. ¿Cómo vivió estas manifestaciones?
R. Yo sigo saliendo a la calle y hablando con estudiantes y adultos. En este momento hay muchas manifestaciones en Alemania en contra de todo lo ocurrido. Ahora veré lo que tiene que decir el presidente federal Steinmeier.
P. Según los sondeos, AfD se alza segundo en intención de voto en las elecciones del 23 de febrero. ¿Cómo explica que tanta gente lo apoye?
R. No lo he seguido tan de cerca, porque no me interesan las cuestiones políticas. Pero cuando estas cosas salen a la luz, como lo ocurrido en el Bundestag, entonces hay que hablar si no se está de acuerdo. Además, creo que si hoy hubiera elecciones en Alemania la gente se despertaría y no votaría a los extremistas de derecha como dicen los sondeos. Por supuesto que yo no votaría por ellos. Yo sé cómo era Alemania en 1945, sé cómo es cuando un dictador toma el timón. Es algo terrible. Mucha hambre y asesinatos, y así sucesivamente. Y el mundo de hoy está lleno de guerra, penurias y pobreza. Esas personas no tienen ni un pedazo de pan ni un vaso de agua para beber. Pero se sigue fabricando material de guerra.
P. Sobrevivió a los campos de concentración de Auschwitz, Mittelbau-Dora y Bergen-Belsen. Luego emigró a Estados Unidos con su hermana en 1947 y regresó en 2012. ¿Cómo fue para usted volver a Alemania?
R. Volví por una enfermedad. Tenía conocidos en Alemania que estaban económicamente bien y me dijeron que volviera, que nos ayudarían. Y eso es lo que hicimos. Pero mi hermana murió tres meses después.
P. ¿Y qué sintió cuando regresó a Alemania?
R. Vi que el país tenía una mentalidad completamente diferente y que era un mundo completamente distinto. Alemania ya no es solo alemana. Aquí vuelven a estar representados todo tipo de países diferentes, todo tipo de personas y todo tipo de idiomas. Es una democracia. Pero si bien los nazis fanáticos ya no están en este mundo, sigue habiendo mucho antisemitismo y odio.
P. Usted habla en las escuelas y cuenta sus recuerdos para que algo así no se repita. ¿Qué opinan los estudiantes?
R. Son maravillosos. No pueden entender por sí mismos lo que hicieron sus abuelos en los años treinta.
P. ¿Pero ha visto un cambio en la sociedad alemana en los últimos años?
R. Sí, y por eso les digo a los estudiantes, a los jóvenes de 18 años, que no deben callarse, que no sean tímidos y que hagan lo correcto. De lo contrario, su futuro no será especialmente bueno.
P. ¿Le vienen a la memoria viejos recuerdos cuando ve cómo hablan algunos políticos de los refugiados?
R. Sí, pero en mi caso soy muy exigente con la política, mi experiencia es muy especial. No me interesan políticos concretos.
P. ¿Y cómo se sintió la primera vez que oyó la palabra “remigración”, un concepto que ha incluido ahora oficialmente AfD en su programa electoral, para referirse a una repatriación a gran escala?
R. Que eso era todo. Que eso es lo que quieren los que siguen a los extremistas de derecha. Y claro que me preocupa, pero ¿qué puedo hacer como individuo? Nada. Solo dar mi opinión.
P. ¿Se siente amenazado en Alemania?
R. Sí, todavía hay un cierto porcentaje que es muy hostil.
P. En este contexto, ¿cómo ve el futuro en Alemania?
R. Voy a cumplir 100 años en tres semanas. Ya no pienso en esas cosas.
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