Aseguradoras “parasitarias” y “corruptas”: la policía investiga las críticas del sospechoso del crimen de UnitedHealthcare
Luigi Mangione, que intenta evitar su extradición a Nueva York, arremetió en redes sociales contra la “codicia corporativa” del sector sanitario y dio abundantes detalles sobre sus problemas de espalda
Pese a todas las precauciones que adoptó —el uso continuado de mascarillas o sus movimientos en diferentes transportes públicos—, Luigi Mangione, el sospechoso acusado de asesinar la semana pasada en Nueva York a Brian Thompson, consejero delegado de UnitedHealthcare, ha dejado una huella indeleble, la digital, que ofrece una explicación aproximada de los motivos que le llevaron a supuestamente tomarse la justicia por su mano y golpear al “corrupto sector”, en sus palabras, de los seguros médicos.
No obstante, la interrupción de su actividad online en primavera, cuando también dejó de dar señales a familia y amigos, proyecta una sombra sobre su ulterior determinación homicida y los planes para llevar a cabo el crimen, en pleno centro de Manhattan. Además de la policía, expertos en terrorismo doméstico intentan dilucidar si tras Mangione había una ideología o más bien, como consideran otros, una patología de tipo psiquiátrico.
Mangione dejó, entre otros escritos, un manifiesto de 262 palabras que llevaba consigo cuando fue detenido en Altoona (Pensilvania). Cotejando ese texto y el reguero de comentarios en redes sociales —ese espejo en que se miran tantas personas rendidas a los likes—, el Departamento de Policía de Nueva York ha elaborado un informe interno que asegura que se veía a sí mismo como una especie de héroe. Y no solo él, sino los miles de internautas que prácticamente han aplaudido su acción como un rapto de justicia ante las grandes corporaciones, como United Healthcare. Un héroe que luchaba contra una industria de seguros sanitarios “parasitaria”.
En sus declaraciones, Mangione no ha explicado de momento por qué eligió a Thompson, de 50 años, director ejecutivo de UnitedHealthcare, una compañía a la que no cita en ninguno de sus post. El análisis policial subraya que el sospechoso “parecía considerar el asesinato selectivo del máximo representante de la empresa como un golpe simbólico”, y recoge otras quejas generales del manifiesto, como que la atención sanitaria en Estados Unidos era cara y que los beneficios empresariales habían aumentado, mientras que “nuestra esperanza de vida” no lo había hecho.
Mangione se resiste a ser extraditado a Nueva York desde Pensilvania, un proceso que podría dejarle retenido allí durante semanas, en la prisión del Estado, y que, en casos similares, como el del acusado de apuñalar a dos personas en el MoMa de Nueva York, se ha demorado incluso meses. Este martes, en su entrada al juzgado de Hollidaysburg, cerca de la localidad donde fue detenido la víspera, el joven forcejeó con los agentes para intentar desasirse y gritó con gesto de rabia a los periodistas: “Está completamente fuera de lugar y es un insulto a la inteligencia del pueblo estadounidense y a su experiencia vivida”, sin precisar qué.
Al salir de la vista, sin embargo, guardó silencio y se mostró cabizbajo, en una nueva muestra de comportamiento errático. El juez le denegó la libertad bajo fianza y el joven, con grilletes y el mono naranja de los presos, fue devuelto a la prisión estatal de Huntingdon, también en Pensilvania, donde permanecerá mientras se decida la extradición.
En Reddit, Mangione había contado con detalle sus problemas de espalda. Algunos de esos mensajes aparecieron en un foro de esa red sobre espondilolistesis, un trastorno en ocasiones muy doloroso en el que una vértebra se desalinea. El dolor de espalda se volvió agudo en 2022 después de practicar surf y empeoró poco después tras una caída, hasta el punto, cuenta, de agarrotársele las piernas. En otra cuenta publicó una radiografía de un pinzamiento. Una de las fotos de su cuenta de X (antes Twitter) es una radiografía de una columna vertebral con cuatro grandes tornillos insertados, pero no se ha confirmado que se trate de la suya y su huella digital no aclara mucho porque se interrumpe en primavera.
En julio de 2023 se sometió a una intervención, contó también en Reddit. “La cirugía no fue ni de lejos tan aterradora como pensaba y en el plazo de una semana vi que había sido la decisión correcta”. Según el citado post, su movilidad mejoró sensiblemente y dejó de tomar calmantes. Pero el dolor lumbar no era el único de sus problemas de salud, y en ocasiones aludió, también en redes, a la “niebla cerebral” —¿un posible estado de confusión?—, que durante sus años universitarios le hacía en ocasiones difícil concentrarse. Mangione decía que los médicos no habían dado con la causa.
En sus publicaciones en Reddit, el joven menciona una sola vez la cobertura de un seguro —de una compañía que no era United Healthcare— por una prueba de diagnóstico del colon irritable en 2018, cuando estudiaba en la Universidad de Pensilvania, que pertenece a la prestigiosa Ivy League. El posible carácter aprensivo o hipocondriaco de Mangione no ofrece más detalles.
El modelo de Unabomber
En las redes sociales dejó también algunos detalles biográficos, como su trabajo como técnico informático en 2015 para la cadena de residencias de mayores propiedad de una rama de su familia, en la que también fue voluntario. Pero de todas sus pistas digitales, son sus referencias a Unabomber en la página de reseñas Goodreads las que más luz aportan, según los investigadores. El análisis policial confirma que el manifiesto hallado en su mochila también citaba a Ted Kaczynski, el nombre real del terrorista doméstico que mató a tres personas e hirió a 22 con bombas de tubo enviadas por correo a científicos y ejecutivos. Con Unabomber, escribe, compartía “la necesidad de una acción unilateral para llamar la atención sobre los abusos corporativos”.
Mangione habló del lobo solitario con un internauta inglés en primavera. Su interlocutor, que el diario The New York Times identifica como Gurwinder Bhogal, dijo que Mangione solo había mencionado brevemente la asistencia sanitaria, quejándose de que era demasiado cara en Estados Unidos y mostrando su admiración por el sistema nacional de salud público del Reino Unido, el famoso NHS.
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