La UE eleva la presión sobre Venezuela a petición de España
Los Veintisiete denuncian que Caracas no ha presentado aún las pruebas “necesarias” para evaluar los resultados electorales conforme a los estándares internacionales y advierten de que solo reconocerá los que sean verificados de manera independiente
La Unión Europea eleva la presión sobre Venezuela ante las maniobras de Caracas para mantenerse en el poder: en una declaración conjunta, de tono endurecido a instancias de España, los Veintisiete han desestimado este sábado el aval de la justicia venezolana a la victoria de Nicolás Maduro en las elecciones del 28 de julio al declarar insuficientes las pruebas presentadas por el Gobierno hasta el momento. En este sentido, la UE advierte de que solo reconocerá los resultados “completos” y verificados de manera “independiente” e insta al Consejo Nacional Electoral (CNE) a publicar las actas electorales de “todos” los centros de votación, tal como reclama también la oposición venezolana.
“A día de hoy, las autoridades venezolanas no han proporcionado las pruebas públicas necesarias para evaluar el proceso electoral de acuerdo con los estándares indicados por el panel de expertos de la ONU”, denuncia en una declaración el alto representante para Política Exterior de la UE, Josep Borrell, en nombre de los Veintisiete.
Ese panel internacional, recuerda Bruselas, fue invitado por el propio CNE para evaluar la conducta general de las elecciones en el marco del Acuerdo de Barbados que condujo a los comicios presidenciales del mes pasado. Su informe, cuya versión provisional fue publicada a mediados de mes, “resalta la falta de fundamento de los resultados anunciados por las autoridades venezolanas”, apostillan ahora los Veintisiete.
“Solo se aceptarán y reconocerán resultados completos y verificables de forma independiente, para garantizar que se respeta la voluntad del pueblo venezolano”, subraya la declaración oficial, cuyo tono ha sido endurecido respecto de borradores iniciales que pudo consultar este diario —el texto ha sido negociado durante al menos dos días— a instancias de España, que ya dejó claro el viernes que no reconocerá los resultados de las elecciones hasta que “se publiquen de manera íntegra y verificable las actas con los resultados de las votaciones, de manera que haya plena transparencia (…) como es habitual en todas las democracias”, según han indicado fuentes de Exteriores.
El propio Borrell, tras participar en un seminario en Santander, advertía a la prensa el viernes de que “mientras los resultados no sean verificables, no va a haber reconocimiento de los mismos”.
“La UE sigue instando al CNE a publicar y verificar de manera independiente las actas electorales de todos los colegios electorales”, señala ahora la declaración conjunta de este sábado. Más aún, agrega el texto, “la UE subraya que el panel de expertos de la ONU ha confirmado que una muestra de las actas revisadas publicadas por la oposición exhiben los elementos de seguridad de los protocolos de los resultados originales, confirmando de tal modo su fiabilidad”.
Edmundo González “parece ser el ganador”
La oposición recabó más del 80% de las actas que confrontaban la tesis oficial al mostrar un triunfo de Edmundo González con el 67% de los votos por el 30% de Maduro. “Según las copias públicas de las actas, Edmundo González Urrutia parece ser el ganador de las elecciones presidenciales por una mayoría significativa”, agregan ahora los Veintisiete en su declaración formal.
Pese a ello, el Gobierno venezolano ha hecho caso omiso de los datos y ha insistido en proclamar la victoria de Maduro, validada el pasado jueves por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) del país, ampliamente en manos del chavismo, según coinciden oposición y la comunidad internacional. De ahí que la UE recuerde ahora que “el CNE es el organismo legal y constitucionalmente responsable de la publicación transparente y detallada de los resultados electorales oficiales”.
“El pueblo venezolano tiene que decidir su propio destino y su voluntad debe prevalecer”, insiste la UE, que por ello asegura que “seguirá trabajando con sus socios regionales para garantizar que la voluntad del pueblo venezolano expresada en las urnas es respetada”. Una Unión “profundamente preocupada por la cada vez más profunda crisis” del país sudamericano se compromete también a trabajar con la comunidad internacional para “facilitar un diálogo liderado por venezolanos que proporcione garantías a las dos partes, lleve a la restauración de la democracia y a resolver las actuales crisis humanitarias y socioeconómicas”.
Al mismo tiempo, insta al Gobierno de Maduro a “respetar el derecho de todos los venezolanos a manifestarse de forma pacífica y a manifestar libremente sus opiniones políticas sin miedo a represalias”. Las autoridades deben “abstenerse de usar una fuerza excesiva, poner fin a la represión y acoso de la oposición y la sociedad civil y liberar a todos los presos políticos”, exigen los Veintisiete, que también quieren una “investigación exhaustiva de todas las violaciones de los derechos humanos” cometidas para que “los responsables de las mismas respondan” ante la justicia.
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