El atacante de Robert Fico: un hombre oscuro con un pasado ultranacionalista y prorruso
Juraj Cintula abogó por crear milicias armadas frente a la llegada de “cientos de miles de migrantes” y despreció en sus escritos a la minoría gitana
Muchas incógnitas planean sobre Juraj Cintula, el hombre de 71 años que este miércoles disparó cinco balas a Robert Fico, el primer ministro de Eslovaquia, quien permanece hospitalizado en estado grave. Poeta y miembro de un club literario, en el último decenio Cintula estuvo vinculado a un grupo paramilitar ultranacionalista y prorruso, fundó una plataforma contra la violencia, escribió sobre su desprecio hacia la minoría gitana y, recientemente, manifestó su rechazo al Gobierno de Fico.
Las autoridades eslovacas aún no han hecho público el nombre del agresor, que fue detenido inmediatamente después del ataque, pero medios locales lo identificaron como Juraj Cintula y comenzaron a difundir algunos detalles sobre su pasado. Natural de Levice, una ciudad 75 kilómetros al sur de Handlová, la localidad en la que se produjo el ataque del miércoles, estuvo empleado como guardia jurado en una empresa de seguridad. Poco más ha trascendido sobre su vida laboral.
Desde 2015 era miembro de la Asociación de Escritores Eslovacos. En Levice, donde residía en un modesto apartamento en un edificio de siete plantas, fue uno de los fundadores del Club Literario Dúha (Arcoíris). Uno de los 23 miembros del club, Andrej Hlinka, fue candidato del Partido Popular Eslovaco, formación de extrema derecha, en las elecciones regionales de 2022. Cintula publicó tres libros de poesía en los últimos años, uno de ellos plagado de insultos a la comunidad gitana de Eslovaquia.
Más allá de las inclinaciones literarias, en 2016, el autor del atentado fundó una plataforma política llamada Movimiento contra la Violencia. “El mundo está lleno de violencia y armas, como si la gente hubiera enloquecido”, declaró en un vídeo difundido en las redes sociales. Cintula instó a la ciudadanía a “salir de nuevo a las calles, llenar las plazas, mostrar la fuerza pero no la violencia” y aseveró que la democracia eslovaca estaba amenazada por “los oligarcas y ricos que compran a los representantes políticos”.
Mientras dirigía el Movimiento contra la Violencia, Cintula mantenía vínculos con Slovenskí Branci, un grupo paramilitar ultranacionalista y prorruso que se disolvió en 2020. En un vídeo publicado en 2016 en Facebook se ve a Cintula en un acto del grupo extremista, en el que abogó por la creación de milicias armadas que protejan a los europeos de la llegada de “cientos de miles de migrantes”. Slovenskí Branci actuó durante años como una herramienta de propaganda del Kremlin, al criticar a la OTAN y la UE por supuestamente amenazar los intereses rusos.
Protestas antigubernamentales
Tras ser detenido, Cintula, que se enfrenta a una pena de entre 25 años y cadena perpetua, justificó su agresión a Fico en que no estaba de acuerdo con las políticas del Gobierno y denunció sus “ataques” a la radiotelevisión pública. El ministro del Interior eslovaco, Matus Sutaj Estok, definió este jueves al atacante como un “lobo solitario” y aseguró que recientemente había participado en varias protestas antigubernamentales. El autor del atentado estaba “muy involucrado en los acontecimientos políticos” y los motivos del ataque fueron, supuestamente, su desacuerdo con el cese de la ayuda militar a Ucrania, la abolición de la Fiscalía Anticorrupción o el cierre de la radiotelevisión pública que planeaba Fico, según Sutaj Estok. El primer ministro eslovaco ha interrumpido la ayuda militar que Eslovaquia daba a Ucrania y ha defendido un alto el fuego con Rusia, aun a costa de que Kiev acepte pérdidas territoriales. Sutaj Estok también subrayó que el atacante tomó “su decisión” el pasado abril, tras la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en las que resultó vencedor Peter Pellegrini, aliado de Fico.
En unas declaraciones al medio digital eslovaco Aktuality.sk, el hijo de Cintula aseguró que su padre tenía licencia de armas y que jamás escuchó ningún comentario en el que expresara su intención de agredir o matar a nadie. “No tengo la menor idea de lo que pretendía, ni de lo que planeó o pasó”, agregó, antes de añadir que su padre no tiene ningún tipo de problema psiquiátrico. Mile Ludovit, un jubilado que ha sido vecino de Cintula durante muchos años, declaró a Reuters: “Era un hombre educado que no parecía especialmente interesado por cuestiones políticas, pero sentía que algunas de las medidas del Gobierno no eran las adecuadas”.
Sigue toda la información internacional en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.