Un niño de tres años mata accidentalmente a su hermana de uno con una pistola en California

Las armas de fuego provocan una nueva tragedia en Estados Unidos. Un menor de tres años ha disparado y matado a su hermana, de uno, con una pistola que no estaba bajo resguardo. El accidente ocurrió la mañana de este lunes en la comunidad de Fallbrook, al noreste de San Diego. De acuerdo con la Oficina del Sheriff de esta ciudad, los hechos ocurrieron sobre las 07.30 locales. La Policía no ha especificado quién hizo la llamada a los servicios de emergencia ni donde estaban los padres de los menores a la hora del incidente. Este tipo de muertes ha ido al alza en los últimos años, de acuerdo a grupos que luchan por la regulación de las armas de fuego. Desde inicios de mayo se han registrado, en promedio, uno al día, más de 70 tiroteos accidentales con infantes en todo el país. En el 31% de los casos, el tirador tenía menos de seis años.

La Oficina del Sheriff informó a través de un comunicado de prensa que los agentes que llegaron a la residencia encontraron a la bebé de un año. Esta tenía una “herida en la cabeza”. La niña fue trasladada a un hospital por personal del Departamento de Bomberos, pero se declaró que había muerto sobre las 8.30 de la mañana. La causa de muerte fue el impacto de la bala. Las autoridades no indicaron si se hicieron más disparos. Los policías que visitaron la casa confirmaron que el menor de 3 años había tenido contacto con el arma de fuego.

Las autoridades han asegurado que, por el momento, no darán a conocer el nombre de la familia o de la víctima por respeto a la tragedia y porque la fallecida era una menor de edad. La investigación se mantiene abierta. Los detectives especializados en homicidios están reuniendo más información que ayude a determinar cómo es que un menor de tres años se hizo con el arma letal. “No hay sospechosos ni riesgo alguno para la comunidad”, ha señalado la Oficina del Sheriff.

El verano suele ser una época donde aumentan tragedias como esta en el país más armado en el mundo. Con el fin del año escolar, que llega en mayo y junio, cientos de miles de menores pasan más tiempo en casa, con lo que crece también el riesgo a que se vean expuestos a armas e incidentes como el que ha sacudido este lunes a Fallbrook. Desde el 1 de mayo se han registrado 73 tiroteos accidentales que involucran a niños, de acuerdo con Everytown, una organización sin fines de lucro que aboga por una regulación más estricta de las armas. Es la cifra más alta desde 2015, el año en que el grupo comenzó el conteo. Al menos 23 de los tiradores tenían menos de seis años.

“La violencia armada es un asunto muy complejo que necesita de soluciones integrales, pero resguardar bien las armas es una forma muy sencilla e increíblemente efectiva forma de salvar vidas. Nuestros niños no pueden permitirse que los adultos descuiden las responsabilidades más básicas de la propiedad de armas”, aseguró Sarah Burd, directora de investigación de Everytown sobre el aumento de estos incidentes. “Es desgarrador estudiar los números y ver cuántos menores han tenido acceso a armas y, sin querer, se han dado un tiro o alguien más este verano, a menudo a algún hermano o un amigo con el que estaban jugando”, añadió.

Un fin de semana muy violento, a mediados de junio, dejó cuatro niños heridos en incidentes separados en Indianápolis, Indiana. En dos días 23 personas resultaron con impactos de balas en esa entidad, que ha superado en verano los 100 homicidios. En Michigan, un niño de seis años tomó el arma de sus padres, que no estaba guardada, y disparó sin querer contra su hermana, que tenía menos de un año, mientras ella estaba en un brincolín. La menor salvó la vida a pesar de haber recibido dos balazos, en el hombro izquierdo y en la mejilla.

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