Giorgia Meloni define a Berlusconi como “uno de los hombres más influyentes de la historia de Italia”
Representantes de la sociedad y la política han reconocido el impacto del magnate en la política de su país. Vladímir Putin, que recibió el apoyo del italiano incluso tras la invasión de Ucrania, lo ha definido como “un verdadero amigo”
La figura de Silvio Berlusconi, fallecido este lunes a los 86 años, político discutido e influyente, tres veces primer ministro de Italia, empresario de éxito, fundador de un imperio mediático, copó la vida pública de todo un país durante más de dos décadas y marcó la cultura popular italiana. La noticia de su desaparición ha provocado una cascada de reacciones en todos los ámbitos del país transalpino. Representantes de la sociedad, la cultura, las instituciones y de todo el arco político han reconocido la enorme huella del magnate en la Italia reciente.
La primera ministra, Giorgia Meloni, líder de la coalición de derechas que gobierna el país, un ámbito político que en otros tiempos capitaneó Berlusconi, ha publicado un mensaje de vídeo en el que define al Cavaliere como “uno de los hombres más influyentes de la historia de Italia”. “Era, sobre todo, un combatiente, un hombre que nunca tuvo miedo a defender sus convicciones, con coraje y determinación”, ha señalado la líder del ultraderechista Hermanos de Italia en un vídeo grabado en su despacho gubernamental. Y ha agregado para despedirse de su socio: “Fue exactamente esa valentía y determinación lo que le hicieron uno de los hombres más influyentes de la historia de Italia y le permitieron imprimir verdaderos cambios en el mundo de la política, de la comunicación y de la empresa. Con él, Italia ha aprendido que no debía imponerse límites, darse por vencida. Con él nosotros hemos combatido, vencido y perdido muchas batallas y también por él cumpliremos los objetivos que nos habíamos fijado”. “Adiós, Silvio”, concluyó Meloni, que fue ministra por primera vez —de Juventud— en 2008, durante uno de los gobiernos de Berlusconi.
Matteo Salvini, la otra pata de la coalición de derechas, viceprimer ministro y ministro de Transportes, y que aspira a ocupar el espacio que deja Berlusconi, ha calificado al desaparecido político como “un gran amigo” y “un gran italiano” y ha suspendido todos los actos públicos que tenía programados para el lunes. “Me dijo: tantas obras que empecé, termínalas tú. Quedan tantas obras por hacer, seguramente será más difícil, porque él fue capaz de poner a todo el mundo de acuerdo”.
En la izquierda han recordado la pasión política del Cavaliere y también la manera en la que polarizó el país durante décadas. La líder del Partido Democrático (PD) Elly Schlein ha coincidido en que “se acaba una era con la muerte de Silvio Berlusconi”, y ha agregado: “Todo nos divide y nos separa de su visión política, pero queda el respeto que humanamente se le debe a quien fue protagonista de la historia de nuestro país”.
Giuseppe Conte, ex primer ministro y líder del Movimiento 5 Estrellas, ha recordado que el político y empresario “contribuyó a escribir páginas significativas de nuestra historia en todos los campos en los que se introdujo”. Y ha agregado: “Provocó y polarizó el debate público quizás como ningún otro, y también quienes lo enfrentaron como un opositor político al que debe reconocer que nunca le ha faltado coraje, pasión, tenacidad”.
El también ex primer ministro de centro izquierda Matteo Renzi, actual líder de Italia Viva, rival y al mismo tiempo aliado forzoso del Cavaliere, ha evocado también la capacidad de polarización de Berlusconi: “Muchos lo amaban, muchos lo odiaban: hoy todos deben reconocer que su impacto en la vida política pero también económica, deportiva y televisiva no tiene precedentes”, ha escrito en sus redes. El presidente de la República, Sergio Mattarella, ha recordado, por su parte, a Berlusconi como “protagonista de largas temporadas de la política italiana y de las instituciones republicanas”.
Fuera de Italia, el exmandatario fue una figura amada y odiada a partes iguales, aunque este lunes han predominado los elogios. Manfred Weber, jefe de grupo del Partido Popular Europeo, al que pertenece Forza Italia, ha agradecido “la energía y dedicación con que trabajó por su amada Italia, por su familia política y por sus ideales europeos”.
Según apuntan los medios italianos, el presidente ruso, Vladímir Putin, ha enviado un sentido mensaje de pésame: “Berlusconi será recordado en Rusia como un constante y principal partidario del fortalecimiento de las relaciones amistosas entre nuestros países. Para mí Berlusconi era una persona muy querida, un verdadero amigo, y siento una sincera admiración por su sabiduría y su capacidad para tomar decisiones”. Berlusconi fue durante años unos de los principales aliados de Putin en Occidente, e incluso lo apoyó de diferentes formas tras la invasión rusa de Ucrania, lo que causó desaprobación en el seno de la mayoría de Gobierno en Italia.
El primer ministro húngaro, el ultranacionalista Viktor Orbán, se ha despedido también de uno de sus más antiguos aliados y lo ha elogiado: “se ha ido el gran luchador. La amistad entre ambos se remonta a los años anteriores de la integración de Hungría en la Unión Europea y cuando el húngaro llegó al por primera vez en Hungría ya expresaron que compartían la misma visión sobre el futuro del continente. En los últimos años, los dos líderes se habían apoyado mutuamente.
La ultraderechista francesa Marine Le Pen, presidenta del partido Reagrupamiento Nacional, ha calificado a Berlusconi como “una figura atípica, con una vida extraordinaria y una carrera deslumbrante, que dejó innegablemente su huella en la vida política italiana. Expreso mis condolencias a la desconsolada Italia”.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, amigo histórico de Berlusconi, también ha despedido al político: “Silvio era un gran amigo de Israel y siempre estuvo a nuestro lado. Descanse en paz, amigo mío”.
El mundo del fútbol también ha llorado la desaparición de Berlusconi. El Milan, el equipo del que fue propietario desde 1986 hasta 2017, con el que ganó 8 títulos de liga y 5 Champions, entre otros muchos trofeos, lo ha recordado con cariño: “Mañana soñaremos con otras metas, inventaremos otros retos, buscaremos otras victorias. Que valgan la pena para realizar lo que hay de bueno, de fuerte y de verdadero en nosotros, en todos los que hemos vivido esta aventura de entrelazar nuestras vidas con un sueño llamado Milán. Gracias presidente, por siempre con nosotros”.
El entrenador del Real Madrid, Carlo Ancelotti, que fue durante muchos años jugador y entrenador del Milan durante la presidencia de Berlusconi, también ha publicado sus condolencias: “La tristeza de hoy no borra los momentos felices que pasamos juntos. Lo que queda es una gratitud infinita al presidente, pero sobre todo a un hombre irónico, leal, inteligente, sincero, fundamental en mi aventura primero como jugador y luego como entrenador. Gracias, presidente”.
El exfutbolista y exentrenador Arrigo Sacchi, leyenda del Milan, también ha mostrado una “gran pena”. “Era un gran personaje, que intentó mejorar Italia y el deporte, pero no siempre fue comprendido. Le había llamado hace unos días, pero no pude hablar con él”, ha declarado.
El Monza, el equipo del que era propietario desde 2018, también ha llorado su muerte: “Un vacío que nunca podrá llenarse. Para siempre con nosotros. Gracias por todo, presidente”, ha escrito el equipo en sus redes.
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