Lula defiende en Madrid que Ucrania “conserve su territorio y que Rusia se quede con el territorio ruso”

Luiz Inácio Lula da Silva ha llegado a España con la convicción de que su visión de la guerra en Ucrania resultará clave en este primer viaje europeo. Al presidente brasileño le persiguen en Occidente sus polémicas declaraciones del pasado 7 de abril, cuando en relación con un fin negociado a la guerra en Ucrania afirmó: “Zelenski no puede tampoco quererlo todo”. Lula defiende una tercera vía con países neutrales para negociar una salida a la guerra. En un encuentro con empresarios celebrado este martes por la tarde en Madrid, su primer acto público en España desde que asumió la presidencia, insistió en que Brasil está comprometido con conseguir la paz, “para que Ucrania pueda conservar su territorio y que Rusia se pueda quedar con el territorio ruso”, señaló, sin detallar a qué se refería al hablar de suelo ruso.

Lula explicó, en un acto celebrado en Casa de América, que se ha dedicado a conversar con diferentes mandatarios como el presidente estadounidense, Joe Biden, y el chino, Xi Jinping, para intentar construir un movimiento por la paz. Ante los asistentes al encuentro empresarial, que contó con la presencia de la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, y el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, enfatizó que también abordará el asunto este miércoles con el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, para intentar buscar una solución al conflicto. Su agenda oficial incluye también un encuentro con el rey Felipe VI. Con el presidente francés, Emmanuel Macron, hablará la semana que viene.

En esa primera aparición en Madrid, el presidente brasileño afirmó que la guerra jamás debió haber empezado. “No se puede admitir que un país invada y desestime la integridad territorial del otro, pero es una guerra en donde nadie habla de paz”, declaró. El mandatario acusó a las dos partes, el agresor y el agredido, de negarse a hablar. “Si nadie quiere intentar resolver esta situación, ¿cómo llegará la paz? Si tanto el lado que ataca, como el lado que está siento atacado son reticentes, me pregunto: ¿quién negociará la paz?”, reprochó. Lula subrayó otro argumento en su defensa de la paz: la importancia de Ucrania en el mercado mundial. “Ucrania debe restaurar la paz para que el mundo no sufra con la falta de alimentos y de fertilizantes y que pueda prosperar con la generación de nuevos empleos”.

“Entiendo el punto de vista europeo sobre la guerra”, añadió el presidente brasileño sobre lo que calificó como “guerra demencial”. El dirigente ha llegado a Madrid este martes después de su visita de Estado a Portugal, donde aterrizó el viernes pasado. En Lisboa se reunió con representantes de la Asociación de Ucranios en Portugal, pero durante la visita dejó patente que su visión no es la de Europa, que apoya militarmente a Ucrania frente a la invasión del Kremlin.

Ante los empresarios reunidos en Casa de América, Lula habló de las relaciones comerciales con España que, como recordó, es el segundo mayor inversor extranjero en Brasil. “La relación de Brasil con España se acerca a los 10.000 millones de dólares”, explicó, y subrayó que su Gobierno espera “atraer capital productivo español a Brasil”. Lula confió también en que cuando España asuma la presidencia rotatoria de la Unión Europea en el segundo semestre del año, se cierre el acuerdo comercial entre la UE y Mercosur y que se logre un tratado “equilibrado”.

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