Indonesia localiza el submarino desaparecido y da por muertos a los 53 tripulantes
Las autoridades descartan un error humano y confirman que el aparato estaba partido en tres partes. Los cuerpos de las víctimas aún no han sido hallados
Indonesia ha dado este domingo por muertos a los 53 tripulantes del submarino desaparecido en la madrugada del miércoles en aguas al norte de Bali después de encontrar el sumergible partido en tres partes a una profundidad de más de 800 metros.
El jefe de las Fuerzas Armadas indonesias, Hadi Tjahjanto, ha ofrecido una rueda de prensa en la que, “con gran pena”, ha anunciado que “los soldados han caído mientras cumplían su deber al norte de Bali. En nombre de todos los soldados y la familia de las Fuerzas Armadas, expreso mis condolencias más profundas a las familias de los caídos. Que Dios les dé serenidad”.
Yudo Margano, jefe de la Marina, ha afirmado que el submarino KRI Rigel, trasladado desde Singapur para ayudar en la búsqueda, localizo el KRI-Nanggala-402 partido en tres a una profundidad de unos 838 metros y recalcó que el accidente no se debió a un error humano. Según explicó Margano, que mostró algunos vídeos del submarino durante la rueda de prensa, las partes trasera y delantera del sumergible se desprendieron y la parte central se mantenía entera, pero se pueden observar algunas grietas. Además de Singapur, también se han implicado en la búsqueda Australia, India y Estados Unidos, con equipamientos especiales para ayudar a localizar el submarino.
Según la información del Ejército indonesio, el submarino inició la inmersión a las 3.46 hora local del miércoles (22.46 del martes en la España peninsular) y unos 15 minutos después inició la carga del tubo lanzatorpedos número 8. La última comunicación con los tripulantes tuvo lugar a las 4.25 hora local (23.25 del martes) y antes de autorizar el lanzamiento del torpedo se perdió la conexión con la nave.
Los equipos de rescate todavía no han podido hallar los cuerpos de ninguno de los tripulantes, que, una vez recuperados, serán trasladados a la ciudad de Surabaya, en la isla de Java. Aunque está ya localizado, la gran profundidad a la que se encuentra, superior a la que puede alcanzar la Marina indonesia con sus equipamientos, dificulta la recuperación de la nave hundida, en cuyo interior podrían seguir los cuerpos de los militares perecidos.
Las autoridades, que el sábado dieron por hundido el submarino, pero aún albergaban la esperanza de encontrar algún tripulante vivo, sospechan que comenzó a sufrir grietas cuando se encontraba a entre 400 y 500 metros bajo la superficie, pues no fue diseñado para descender más.
Cientos de personas en barcos y helicópteros de la Marina indonesia han peinado la zona sin descanso en los últimos días ayudados por el sistema sonar y otros equipos las aguas del norte de la isla de Bali donde se perdió el contacto del submarino KRI Nanggala-402, fabricado en Alemania en 1977, durante unas maniobras militares.
Otras tragedias
Indonesia cuenta en la actualidad con una flota de cuatro submarinos, uno de fabricación alemana —sin contar el que se ha hundido—, y tres fabricados en Corea del Sur.
La desaparición del submarino evoca otras tragedias como la del sumergible de la Armada argentina ARA San Juan, con 44 tripulantes, desaparecido en 2017 y encontrado un año después, así como el grave accidente del submarino nuclear ruso Kursk.
El accidente del buque ruso, considerado la joya de la Flota del Norte rusa, que tuvo lugar el 12 agosto de 2000 cuando durante unas maniobras navales quedó sumergido en reposo en el fondo del Ártico con 118 tripulantes a bordo, es el más grave hasta la fecha.
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