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La red de transporte público de São Paulo registra un aumento de viajeros del 50%

El número de usuarios en la región metropolitana sube de dos a tres millones con la reapertura económica, un tercio del total de viajeros de antes de la crisis sanitaria

Pasajeros de transporte público, en Barra Funda, São Paulo, este 4 de junio.
Pasajeros de transporte público, en Barra Funda, São Paulo, este 4 de junio.Camila Svenson

Desde que la covid-19 llegó a Brasil, Gabriela Mourato solo dejó de trabajar cuando contrajo la enfermedad, en abril. La joven, que está subcontratada en un banco de São Paulo, actividad considerada esencial durante la pandemia, estuvo tres días en un hospital tras sentir que le faltaba el aire y luego guardó cuarentena en casa, hasta que mejoró. Residente de Embú das Artes, a 30 km de la capital, tiene que desplazarse en autobús, metro y tren para llegar al trabajo. “En las últimas semanas, todos los transportes están más llenos, yo sigo teniendo mucho miedo, aunque haya contraído el coronavirus. No sé si soy inmune, algunas personas llevan mascarilla, otras no, siento que me arriesgo. Pero la empresa en que trabajo no me ha dado ninguna alternativa”, dice al salir de una estación de metro en la capital, en dirección al terminal de autobuses, relativamente vacía a las 8:30 del miércoles pasado. São Paulo, con 46 millones de habitantes, es el Estado de Brasil con más casos de covid-19 en el país: 129.000 confirmados. Suma 8.560 muertes por coronavirus hasta el jueves, 4 de junio, un cuarto de lo que ya fue registrado en Brasil.

La circulación en transporte público en la región metropolitana de São Paulo, que suma 39 ciudades alrededor de la capital, bajó a un tercio del volumen diario normal desde que el gobernador, João Doria, decretó el confinamiento el 24 de marzo. Según el secretario estatal de Transportes de São Paulo, Alexandre Baldy, desde finales de marzo hasta el 3 de junio, el volumen de usuarios pasó de dos a tres millones. Antes de la pandemia eran 10 millones. Con la reapertura gradual de las actividades a lo largo de este mes, el flujo va a crecer. “El miércoles pasado llegamos a 3.053.000, el número más alto desde el comienzo de la cuarentena. Es un aumento del 50%, un crecimiento sustancial. Y la mayoría de los usuarios se concentran en las horas punta, lo que supone un reto para no generar aglomeraciones”, explica el secretario.

Para evitar que aumenten los contagios, se ha intensificado la higiene de los vehículos y las estaciones. Según Baldy, la flota de buses, que se redujo desde el comienzo de la cuarentena, opera actualmente entre el 65% y el 100% de la capacidad, según la hora y la demanda.

Geraldo Ferreira, que trabaja como montador de estructuras metálicas en una obra, se queja de que esta reducción ha hecho que el autobús que toma para volver a casa esté siempre lleno. “En la obra, nos tomamos la temperatura, nos ponemos mascarilla, tenemos gel hidroalcohólico, me siento seguro. El problema es cuando tengo que volver a casa”, dice. "El autobús va lleno todos los días. Es el momento de mayor riesgo. Pero es mejor arriesgarse que no tener trabajo”, añade.

Matheus Brito, de 24 años, dice que al principio de la pandemia, siempre se veía al personal de la limpieza higienizando los autobuses y el metro, la gente mantenía la distancia. “Pero ahora está lleno, incluso hay tráfico. Es como en los tiempos normales”, lamenta.

La Secretaría de Transportes Metropolitanos alega que la operación se controla en tiempo real. Y cuando se detecta que se necesitan más trenes o autobuses, se incluyen inmediatamente para evitar aglomeraciones y prevenir la propagación del virus.

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Horarios escalonados

Con la inminente apertura de oficinas, centros comerciales, concesionarias e inmobiliarias —que deberán presentar un protocolo de seguridad que el Estado tiene que aprobar—, el secretario Alexandre Baudy afirma que será necesario que el transporte vuelva a funcionar al 100%. Sin embargo, defiende que se escalonen los horarios de apertura y cierre de cada actividad comercial para evitar concentraciones en horas de punta (de 5:30 a 7:30 y de 17:30 a 19:30). “La gente tiene que ir y volver del trabajo en horas diferentes para que podamos diluir la hora punta, repartirlas a lo largo de 6 horas. Esta es la única fórmula que funciona en otros países que ya están pasando por este momento de reapertura, como China. Por ejemplo, un centro comercial puede abrir de las 13.00 a las 20.00, así los empleados no tendrán que tomar el transporte público durante las horas que va más lleno”, dice el secretario.

El horario de funcionamiento del comercio lo define cada municipio. “He comunicado a todos los Ayuntamientos a los que atendemos (que son 134) que este procedimiento es fundamental para evitar que haya aglomeraciones durante dos horas al día. Estamos participando en los debates sobre la desescalada para estar preparados”, explica.

Otros negocios, como concesionarias de vehículos, volvieron a funcionar este viernes, 5, siempre que las horas de apertura y cierre no coincidan con las horas punta de la ciudad. Las oficinas podrán atender al público durante cuatro horas al día. El alcalde Bruno Covas explica que, a medida que más sectores vuelvan a abrir al público, la flota de autobuses se reforzará con 2.000 vehículos “para evitar aglomeraciones” .

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