El socialismo portugués triplica sus votos en Madeira

A 15 días de las elecciones generales portuguesas, el partido socialista ha triplicado sus votos en los comicios regionales del archipiélago atlántico de Madeira, donde, pese a ello, seguirán gobernando los conservadores del PSD como lo llevan haciendo desde hace ya 43 años. El éxito le ha permitido acabar con la mayoría absoluta del partido gobernante PSD, pero no que deje de gobernar. El PS del primer ministro António Costa consiguió un resultado histórico en la región autónoma. Obtuvo el 35,5% de los votos cuando hace cuatro años —en coalición con diversos partidos de izquierda— consiguió el 11,4%. Ha pasado de cinco a 19 diputados regionales. 

El candidato del PSD y presidente de Madeira, Miguel Albuquerque, ha bajado cinco puntos, del 44% al 39% y ha obtenido 21 escaños, a tres de la mayoría absoluta que, sin embargo, la obtendrá gracias al apoyo de los tres diputados del CDS. Habrá un Gobierno regional de coalición de centro-derecha, ya que PS (19), Juntos Por el Pueblo (tres) y PC (uno) no suman escaños suficientes para quebrar esa coalición.

Los resultados confirman una bipolarización en favor de los dos grandes partidos, ya que el PC ha perdido uno de sus dos diputados, el Bloco los dos y JPP dos de los cinco que tenía hace cuatro años. Por primera vez desde 1984, la abstención ha bajado, quedándose en el 45%.

En plena campaña electoral de las legislativas del 6 de octubre, PS y PSD han aprovechado los resultados para darles una lectura nacional. El PS, por el lado del aumento de sus votos en una región que siempre le fue esquiva; y el PSD, para demostrar que la suerte no está echada y que las encuestas —que dan una clara victoria a Costa— se pueden equivocar.