Muere Atal Bihari Vajpayee, tres veces primer ministro de India

El ex primer ministro, Atal Bihari Vajpayee, quien ordenó los primeros ensayos nucleares para hacer de India una potencia bélica y, posteriormente, viajó en autobús al vecino Pakistán en un histórico gesto diplomático, ha fallecido a los 93 años de edad en Nueva Delhi. Su muerte fue anunciada el jueves en el Hospital All India Institute de la capital, donde el que fue tres veces máximo mandatario del país asiático estaba siendo tratado desde hacía más de dos meses de una infección de riñón y una congestión en el pecho.

Vajpayee capitaneó el nacionalismo hindú del Bharatiya Janata Party (BJP) durante décadas y fue fuente de inspiración del actual líder del partido y primer ministro del país, Narendra Modi, quien ha calificado su muerte como “pérdida irreparable”. En un mensaje en Twitter, el jefe del Ejecutivo indio expresó su admiración y respeto por su predecesor: “Fue el liderazgo de Atal lo que sentó las bases de una India fuerte, próspera e inclusiva en el siglo XXI [...] Su lucha y perseverancia construyeron BJP ladrillo a ladrillo”.

Periodista y poeta reconvertido en político, Vajpayee fue uno de los pocos legisladores de la oposición dentro del Parlamento cuando el primer líder de la India independiente, Jawaharlal Nehru, aun gobernaba el país. Pese a sus diferencias y al contrario que el actual discurso político nacional, la admiración por este último estuvo presente en la celebrada oratoria de Vajpayee; motivo por el cual se ganó el aprecio como hombre de consenso por parte de adversarios. “Millones le quisieron y respetaron. Hoy India perdió a uno de sus grandes hijos”, escribió este jueves en Twitter, Rahul Gandhi, líder del opositor Partido del Congreso.

Tras un paso fugaz como líder del Ejecutivo en 1996, Vajpayee fue el primer político indio en gobernar el país sin pertenecer al Partido del Congreso, gracias a una coalición liderada por el BJP, entre 1998 y 2004. Al comienzo de su primera legislatura, India empezó sus ensayos nucleares para disuadir a los vecinos China y Pakistán. La respuesta similar de este último, sin embargo, sumió a ambos países en una frenética carrera nuclear y alteró para siempre la seguridad en el sur de Asia. Su viaje en autobús desde Delhi a Lahore para encontrarse con el entonces primer ministro pakistaní, Nawaz Sharif, en 1999 fue un significativo gesto de paz que se vio truncado por el conflicto fronterizo en la disputada región de Cachemira, aún hoy vigente.

A pesar de las tensiones perennes entre ambos países, el recientemente elegido primer ministro del vecino Pakistán, Imran Khan, se refirió a Vajpayee como “una figura sobresaliente”. “Los esfuerzos de Atal Bihari Vajpayee para mejorar los lazos entre Pakistán e India siempre serán recordados. Es mediante el establecimiento de la paz como realmente podemos honrar [su] legado”, declaró Khan.

Desde el punto de vista de la política nacional, Vajpayee fue uno de los pocos líderes del BJP en mostrar su pesar cuando cientos de musulmanes fueron asesinados en los disturbios ocurridos en 2002 en el occidental Estado de Gujarat, entonces gobernado por el actual primer ministro, Modi. Con igual talante conciliador para evitar la violencia entre indios hindúes y musulmanes, Vajpayee también se refirió a la destrucción de una mezquita del siglo XVI por parte de fanáticos hindúes como “la hora más oscura de India”.

En 2004, Vajpayee perdió las elecciones en favor de Partido del Congreso, liderado entonces por Manmohan Singh, quien declaró ayer jueves: “Vajpayee estuvo entre los más altos líderes de la India moderna y dedicó su vida entera a nuestro gran país. Sus servicios a nuestra nación serán recordados para siempre”. En 2009, Vajpayee se retiró de la vida pública tras un infarto.