Un lanzallamas, el último invento de Elon Musk

Elon Musk pretende salvar a la humanidad. Su plan final consiste en llevar la civilización a Marte. Es posible que su último invento contribuya a exterminarla antes de que se pueda ejecutar la mudanza con éxito. El fundador de Tesla suele promocionar objetos de su empresa de túneles, The Boring Company (un juego de palabras entre aburrido y taladragora, dos significados de 'boring'), para conseguir fondos y agitar las redes sociales.

El domingo se sacó de la manga lo que parecía una broma, pero no lo es. Un lanzallamas de 500 dólares que se puede encargar en su web. En diciembre ya hizo referencia a este objeto, pero sonó a broma. Musk ha cumplido su promesa. Dijo que si era capaz de vender 50.000 gorras con el logo de dicha compañía, vendería el lanzallamas.

La inspiración para este objeto viene de Spaceballs, una película que parodia Star Wars. Musk sostiene que ofrecerá un extintor por 30 dólares adicionales. Solo durante el domingo vendió más de 20.000 unidades del peligroso objeto.

Si se compra desde fuera de Estados Unidos es necesario aceptar un cargo extra por el envío. Todos los compradores tienen que leer y aceptar los términos de uso y condiciones, algo así como un pliego de descargo por parte de Musk sobre los posibles daños causados por su última creación.

El propio Musk ha reconocido que el objeto no es de su creación. Su única contribución es la pegatina de la startup que creó a partir de un enfado. Harto de los atascos de Los Ángeles, donde reparte su tiempo con la Bahía de San Francisco, se propuso comenzar a cavar túneles para esquivar el tráfico de las autopistas.

Musk tiene varias propuestas relacionadas con el transporte más allá de Tesla, con coches eléctricos y baterías. Space X se dedica a los cohetes y satélites. Hyperloop es un sistema ideado por él pero ejecutado por diferentes startups que compiten por usar cápsulas con pasajeros propulsadas por aire comprimido dentro de túneles.