Japón aprueba la ley que permitirá abdicar al emperador Akihito
La Cámara Alta del Parlamento nipón ha aprobado una propuesta legislativa que permitirá al emperador ceder el trono a su hijo
El Parlamento japonés aprobó este viernes por una amplia mayoría la ley que permitirá abdicar al actual emperador Akihito. El soberano, de 83 años, expresó el año pasado en un discurso televisado su voluntad de abandonar el trono por su avanzada edad y problemas de salud. Como la normativa que rige la Casa Imperial nipona solamente contempla la sucesión al trono tras la muerte, el Gobierno decidió sortear el impedimento legal aprobando un proyecto de ley hecho específicamente para Akihito.
Con esta ley ya en vigor, el Ejecutivo nipón tiene tres años para fijar, con un decreto, la fecha en la cual el actual emperador cederá el trono del Crisantemo a su hijo mayor, el príncipe heredero Naruhito. Aunque el Gobierno asegura que ese día aún no está decidido, los medios locales especulan con que el traspaso podría ocurrir a finales de 2018 o inicios de 2019, coincidiendo con el trigésimo aniversario de la llegada de Akihito a la jefatura de Estado en Japón y tras haber cumplido 85 años. Será la primera abdicación en los últimos dos siglos de la Casa Imperial japonesa, una dinastía con más de 2.700 años de antigüedad.
La ley es exclusiva para Akihito en parte con la vista puesta en el futuro de la Casa Imperial. Como en Japón rige la ley sálica y las mujeres de la familia pierden inmediatamente su estatus una vez se casan con un plebeyo, tanto el número de miembros de la familia como los que están en la línea de sucesión va disminuyendo. Tras Akihito, solamente hay cuatro herederos: sus dos hijos, Naruhito y Fumihito; el hijo pequeño de este último, Hisahito; y el hermano menor del actual emperador, Masahito, de más de 80 años.
La familia imperial cuenta actualmente con solamente un varón joven, Hisahito, de 10 años. El resto son mujeres, algunas niñas y otras solteras de entre 20 y 30 años de edad. La princesa Mako, nieta mayor de Akihito y de 25 años, contraerá matrimonio el próximo año con un compañero de universidad y, por lo tanto, dejará de ser miembro de la institución.
Con la rígida legislación actual, el sucesor al trono debe ser un hombre cuyo padre sea de la familia imperial. Por lo tanto, si el pequeño Hisahito no tiene un hijo varón, esta dinastía milenaria podría romperse. "Teniendo en cuenta las edades de los miembros actuales de la familia imperial, [la sucesión] es un problema que no podemos dejar de lado", aseguró el secretario jefe del Gobierno japonés, Yoshihide Suga, en una sesión parlamentaria el miércoles.
De hecho, junto a la ley que permitirá la abdicación del emperador, el Parlamento japonés aprobó también una resolución que precisamente insta al Gobierno a abrir el debate sobre la permanencia de las mujeres en la institución tras el matrimonio. Se trata, sin embargo, de un dictamen no vinculante.
Varios sectores conservadores de la sociedad japonesa, muchos cercanos al actual Ejecutivo liderado por Shinzo Abe, temen que esta propuesta abra el melón a una reforma más profunda de la ley de la Casa Imperial que acabe con permitir el acceso de las mujeres al trono. "El Ejecutivo de Abe mantendrá firmemente el sistema de sucesión basado en la línea paterna directa y únicamente masculina", avisó Suga.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.