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Un vídeo muestra la paliza de un policía israelí a un chófer palestino por rayar su coche

Las autoridades suspenden de empleo al agente y abren una investigación sobre el incidente

Juan Carlos Sanz

Un golpe de chapa, un accidente menor, ha hecho aflorar en la mañana de este jueves duras imágenes de violencia policial en el barrio de Wadi Joz de Jerusalén Este. En un incidente que fue grabado en vídeo desde un automóvil cercano, un agente israelí de servicio y armado se dirige a un camionero palestino para recriminarle que ha rayado su vehículo en una maniobra de aparcamiento. En plena discusión entre ambos, el policía le da un cabezazo al conductor sin que medie provocación física, le abofetea repetidas veces, le proyecta un rodillazo en el vientre y le propina puñetazos y patadas.

Cuando varios palestinos se acercan al lugar del incidente, el uniformado les responde de forma amenazadora y golpea a varios de ellos. Después de desaparecer de la escena, regresa junto con otros miembros de las fuerzas de seguridad y lanza una patada al chófer en la espalda cuando intentaba subir a la cabina de su camión.

Del sonido del vídeo se desprende que el policía la pregunta al conductor: "¿Te atreves a amenazarme? ¿Yo voy a pagar por eso, yo voy a pagar por eso? ¡Pedazo de hijo de puta!". A lo que el palestino le replica: "No estoy amenazando a nadie", informa Efe

Las autoridades policiales israelíes han abierto una investigación sobre los hechos recogidos en el vídeo de dos minutos de duración y han suspendido de empleo al agente. “Ha sido convocado para ser interrogado antes de decidir sobre su futuro en el cuerpo”, precisa un comunicado citado por el diario Haaretz. “La conducta del funcionario es extremadamente grave e indignante. Este tipo de comportamientos dañan a toda la institución”, advirtió el ministro de Seguridad Pública, Gilad Erdan. Luba al Samri, portavoz policial israelí de origen árabe, dijo que el vídeo reflejaba “una actitud peligrosa que no es la habitual de las fuerzas de seguridad”.

Ahmad al Tawil, un vecino de Jerusalén Este de 26 años citado por la agencia palestina Maan, presenció el incidente y trató también de intervenir para que el agente dejara de golpear al conductor. Pero a cambio recibió puñetazos en un ojo y en el estómago. En unos acontecimientos inmediatamente posteriores a la grabación, Al Tawil asegura que los uniformados que se presentaron en la zona encañonaron con sus armas a los palestinos que habían acudido a auxiliar al chófer. Representantes políticos y de la sociedad civil palestina denuncian que los agentes abusan de cargo sistemáticamente para humillar verbalmente y maltratar físicamente a la población árabe en Jerusalén Este y Cisjordania.

En Jerusalén casi todo el mundo tiene un móvil que puede grabar imágenes. Las calles de la parte este de la Ciudad Santa y los principales ejes viarios de Cisjordania, ambas bajo ocupación de Israel, están jalonadas de cámaras de seguridad públicas y privadas. Los activistas de las ONG pacifistas israelíes documentan en vídeo incidentes protagonizados por soldados y policías que ensombrecen la vida cotidiana de cientos de miles de palestinos. De tanto en tanto, emergen a la luz pública escenas como las de la paliza del policía al camionero, o la del soldado que remató el año pasado de un tiro en la cabeza en Hebrón a un atacante palestino que yacía malherido.

La Asociación por los Derechos Civiles en Israel (ACRI) intenta ahora que el fiscal general ordene a la justicia militar reabrir el caso de un oficial del Ejército que mató a un adolescente palestino en una zona de Cisjordania cercana de Jerusalén en julio de 2015, según informaba este jueves el diario Yedioth Ahronoth. La víctima presentaba impactos de bala en la espalda. El jefe de los servicios jurídicos castrenses, general Sharon Afek, archivó en abril de 2016 la causa abierta contra el coronel Ysarel Schumer por la muerte de Mohamed Habi al Kasba, de 17 años, quien había roto el parabrisas del vehículo del militar de una pedrada antes de que este le tiroteara.

Las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad de una gasolinera, difundidas por la ONG israelí B´Tselem, desmontaron la versión inicial del coronel de que su vida se encontraba en peligro. El adolescente palestino salió huyendo a la carrera y fue Schumer quien le persiguió junto con otro militar, según se constata en el vídeo. Ambos abandonaron después la zona sin prestar asistencia médica a Al Kasba. El código de conducta militar israelí prescribe que solo se debe disparar a la parte inferior del cuerpo para detener a un enemigo que huye y que se le debe atender después de sus heridas.

Los abogados de ACRI han tenido acceso recientemente a las diligencias en las que se dio carpetazo al caso. De ellas se desprende que el coronel israelí cambió su versión inicial exculpatoria —alegó que el joven palestino parecía llevar a una granada en la mano– después de visionar las imágenes grabadas por la cámara de la gasolinera.  Entonces admitió que había cometido un “error profesional” por no aplicar el protocolo de detención de un sospechoso. El general Afek aceptó su argumento para justificar el archivo de la investigación. A la vista de esta revelación, la ONG pacifista han instado la reapertura de la causa en nombre de los familiares del adolescente palestino fallecido para que Schumer sea procesado por homicidio. “Disparar a matar contra una persona que ya no representa una amenaza es un delito”, sostiene el letrado Roni Pelli en el recurso que ha presentado ante el fiscal general de Israel.

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Sobre la firma

Juan Carlos Sanz
Es el corresponsal para el Magreb. Antes lo fue en Jerusalén durante siete años y, previamente, ejerció como jefe de Internacional. En 20 años como enviado de EL PAÍS ha cubierto conflictos en los Balcanes, Irak y Turquía, entre otros destinos. Es licenciado en Derecho por la Universidad de Zaragoza y máster en Periodismo por la Autónoma de Madrid.

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