Las llamas calcinan 3.000 hectáreas en el sur de Francia

El foco más importante se situaba en la comuna de Rognac, cerca de Aix-en-Provence, donde la Fiscalía ha abierto una investigación para determinar si se trata de un incendio provocado. En la localidad vecina de Vitrolles, también afectada por las llamas, un hombre ha sido detenido para ser interrogado. Unos vecinos le habrían visto cerca de unos del lugar en el que se inició uno de los fuegos. El presidente, François Hollande, prometió “encontrar a los autores” de estos incendios, los peores que ha conocido el país desde 2010, y alabó el “trabajo excepcional” de los bomberos y los equipos de rescate.

Unos 18.000 bomberos han sido movilizado a lo largo de la noche y del día en el departamento, así como un centenar de policías y gendarmes, 500 vehículos de rescate, cinco aviones Canadair y dos helicópteros. La delegación del gobierno pide a los habitantes no salir de casa y despejar los ejes de las carreteras para permitir circular a los servicios de emergencias.

Otro incendio, ya apagado, ha arrasado unos 200 hectáreas en el departamento vecino del Hérault, donde tres bomberos resultaron heridos cuando luchaban contra el fuego, dos de ellos de gravedad. Un nuevo incendió se inició el jueves en el departamento de Pirineos Orientales, donde por la noche ya se habían quemado 650 hectáreas. En total, se han movilizado a 2.500 bomberos.