Emiratos reanuda los bombardeos sobre posiciones yihadistas en Siria

Emiratos Árabes Unidos (EAU) ha reanudado este martes los bombardeos sobre posiciones del Estado Islámico (EI), según ha anunciado un comunicado del Mando Central de las Fuerzas Armadas emiratíes citado por la agencia estatal, WAM. Este país, clave en el apoyo árabe a la campaña de Estados Unidos contra los yihadistas, suspendió sus ataques el pasado diciembre a raíz de la captura de un piloto jordano cuyo avión cayó sobre territorio sirio.

“Un escuadrón de F-16 de la Fuerza Aérea de EAU, estacionado en Jordania, ha lanzado esta mañana una serie de ataques sobre posiciones de la organización terrorista Daesh”, afirma el comunicado militar utilizando el acrónimo árabe para referirse al EI. “Los cazas han bombardeado sus objetivos y regresado a la base sin incidentes”, añade.

El pasado sábado, el jeque Mohamed Bin Zayed, príncipe heredero de Abu Dhabi y segundo jefe de las Fuerzas Armadas de Emiratos, ordenó el envío de uno de sus tres escuadrones de F-16 a Jordania “en solidaridad con su liderazgo e inmensos sacrificios por la seguridad y la estabilidad en la región que representaba el mártir y héroe Moaz al Kasasbeh”. El brutal asesinato de este teniente jordano, conocido a principios de este mes, sacó a la luz que desde su captura Emiratos había suspendido su participación en los bombardeos del EI por discrepancias con Estados Unidos sobre los planes de búsqueda y rescate.

Los responsables emiratíes temieron que uno de sus pilotos pudiera sufrir la misma suerte que Al Kasasbeh y se habían quejado a Washington de que sus equipos de rescate estuvieran radicados en Kuwait, en lugar de en el norte de Irak, mucho más cerca de la zona de bombardeos. Aunque ni EAU ni EE UU comentaron la filtración periodística, pocos días después la prensa norteamericana informaba de que el Pentágono había estacionado una unidad de salvamento en Erbil.

Emiratos es una pieza clave para la campaña contra el EI que ya respaldan 60 países. Por un lado, Estados Unidos dejó claro que no estaba dispuesto a llevar a cabo esta misión sin el apoyo claro de los países árabes suníes (el EI es un grupo extremista suní y la Casa Blanca no quiere que se vea la operación como un enfrentamiento contra esa confesión). Por otro, es “el país árabe que más aviones y salidas ha aportado a la coalición”, explicó a EL PAÍS el politólogo emiratí Abdulkhaleq Abdulla.

De su mando depende, además, la participación de Marruecos, según ha revelado el ministro de Exteriores de ese país al hilo de la interrupción emiratí. Hasta donde se sabe, los miembros árabes de la coalición sólo bombardean al EI en territorio sirio, pero no en Irak.

"Nuestra presencia en Jordania tiene por objetivo apoyar al Ejército árabe jordano en su oposición al grupo terrorista Daesh y facilitar todo tipo de apoyo operativo”, declaró este lunes a su llegada el coronel Saeed Hassan, jefe del escuadrón emiratí destacado en Jordania, citado por la prensa local. El militar también ofreció sus condolencias por la muerte de Al Kasasbeh.

Emiratos dispone de un total de 79 F-16, distribuidos en tres escuadrones, pero no está claro cuántos aviones exactamente ha desplazado a Jordania. Además de pilotos, personal técnico y equipo, la misión cuenta con Airbus 330 militar de reabastecimiento en vuelo y un C-17 para transporte estratégico. Al inicio de la misión, el pasado septiembre, su participación copó los titulares al revelarse que estaba al mando de Mariam al Mansuri, la primera piloto de combate emiratí.