La Caravana del Zorro fracasa en su intento de entrar en el Guinness
La indisciplina de los participantes hace fracasar el propósito Un romero muere atropellado por un camión a 5 kilómetros de Esquipulas
La ilusión de alcanzar el Récord Guinness como la peregrinación en motocicleta más grande del mundo, convirtió a la 54 edición de la Caravana del Zorro, realizada este sábado, en una fiesta nacional en Guatelamala. Todo hacía presagiar que la meta se superaría holgadamente. A su salida de la capital, el río de motoristas alcanzaba, según datos oficiales, 19 kilómetros.
El entusiasmo era evidente. Decenas de miles de vecinos madrugaron para animar, desde las aceras y orillas de la carretera, a los participantes. Con 25 minutos de retraso sobre el horario previsto -07:30 de la mañana- se dio el banderazo de salida. Todo parecía marchar según lo previsto.
Pero la anarquía de los guatemaltecos, acostumbrados a ignorar el Reglamento de Tránsito, echó todo por la borda. Entre los requisitos exigidos por la Comisión Guinness para ingresar al conteo, se debía llevar el casco protector, portar la pañoleta verde que identificaba a los participantes debidamente acreditados, y no viajar más de dos personas por moto. La mayoría los ignoró. Incluso, podía verse a moteros que llevaban el casco colgado del brazo o en el asiento de la moto, o a familias que llevaban a uno y hasta dos niños apretujados como sardinas en el sillín.
Un camión perdió el control del vehículo y atropelló a uno de los últimos motociclistas
Así las cosas, al llegar al punto de conteo, situado en el kilómetro 12,5, no se alcanzó la meta de 20.001 participantes, el récord a batir, aunque era evidente que esa cifra era superada con creces.
Cuando al filo de las 22:30 horas se hizo el anuncio de que el récord no había sido logrado, la desilusión fue generalizada. Inasequible al desaliento, Eddy Villadeleón, el ‘Zorro Mayor’ o máximo dirigente de la peregrinación, prometió que “será el año que viene” y anunció que los organizadores empezarán, “desde este mismo lunes”, a trabajar en una campaña para concientizar a los futuros participantes de que todos los requisitos deben cumplirse.
La fiesta también terminó en tragedia cuando a escasos seis kilómetros de la ciudad de Esquipulas, el chófer de un camión, que no debería circular por el sector, perdió el control del vehículo y atropello a uno de los últimos motociclistas. En el lugar murió el romero Miguel Ambosio Ixcoy, de 46 años. Su acompañante se encuentra hospitalizado.
Fiesta nacional
Desde las 16:00 horas del viernes, los participantes empezaron a llegar a la Plaza Mayor de la capital guatemalteca, el punto de partida, con el firme propósito de formar parte de la historia.
En medio de un jolgorio generalizado, que se prolongó hasta cerca de la medianoche, los jinetes hacían acrobacias en sus motos. Desde las emblemáticas Harley Davidson, hasta japonesas de baja cilindrada (125 cc), las más utilizadas por los mensajeros y repartidores de comida rápida a domicilio, los más entusiastas.
La ‘diana’ se dio al filo de las 04:00, cuando los más madrugadores encendieron sus equipos de sonido con canciones populares. A eso de las 06:00, la Plaza Mayor y calles aledañas estaban repletas.
Los actos protocolarios retrasaron por 25 minutos el banderazo de salida. El resto es ya historia y este domingo la Policía de Tránsito vigila la carretera, en un intento de garantizar un retorno ordenado de los participantes.
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