El repunte de violencia deja otros nueve muertos en Michoacán

Nueve miembros de un grupo armado murieron este martes de madrugada en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad en la ciudad de Apatzingán, capital de Tierra Caliente, la comarca del Estado mexicano de Michoacán marcada desde hace dos años por el levantamiento de autodefensas rurales contra el poder del crimen organizado.

El conflicto michoacano —civiles armados combatiendo a narcos— se redujo en 2014 tras el despliegue del Gobierno federal, que incluyó dotar a un emisario de la Ciudad de México, el comisionado Alfredo Castillo, de plenos poderes en la zona en materia de seguridad y transformar a grupos de autodefensas en fuerzas rurales legales.

Pero a mediados de diciembre la tensión rebrotó con el enfrentamiento con 11 muertos entre dos bandos de exlíderes de autodefensas, Luis Antonio Torres González, Simón El Americano, e Hipólito Mora. Ambos han sido arrestados. El otro hombre fuerte del movimiento de los grupos de civiles armados, José Manuel Mireles, permanece preso desde junio.

El suceso de esta noche en Apatzingán redunda en las dificultades para resolver el conflicto de la región pese a la estrategia del Ejecutivo del presidente Enrique Peña Nieto. El cartel contra el que se levantaron las autodefensas, Los Caballeros Templarios, ha sido diezmado, pero los rescoldos de civiles armados y estructuras criminales no se han apagado.

Michoacán, además, es un Estado vecino del Estado de Guerrero, donde en septiembre tuvo lugar la matanza de Iguala. Asegurar la estabilidad de la región Guerrero-Michoacán (sur del país) apunta como un reto perentorio en 2015 para el Gobierno de México.

El comisionado Castillo ha dado una rueda de prensa este martes por la tarde y ha afirmado que Michoacán "está en calma". Expuso que los últimos casos de violencia en la zona son "un tema muy focalizado de tres municipios" y que los fallecidos esta madrugada eran parte de "grupos de interés o grupos de presión".

Este nuevo episodio comenzó sobre las tres de la mañana cuando fuerzas federales fueron al palacio municipal de Apatzingán a desalojar a un grupo de personas que tenía tomada la alcaldía; en distintos medios mexicanos se afirma que se trata de una banda criminal conocida como Los Viagras.

Durante el desalojo hubo un muerto. A posteriori, los implicados emboscaron a patrullas militares para recuperar vehículos que les habían requisado y hubo ocho muertos más. Según datos del diario Reforma, el número de muertos fue mayor: 11. En el operativo resultaron heridos dos policías federales. Han sido detenidas 44 personas.