Dimite el primer ministro ucranio tras la ruptura de la coalición de Gobierno
Los partidos UDAR y Svoboda rompen la coalición de Gobierno para forzar el adelanto electoral
El primer ministro ucranio, Arseni Yatseniuk, se vio obligado a dimitir este jueves después de que dos partidos que apoyaban su Gobierno abandonaran la coalición parlamentaria —también lo hicieron 15 diputados independientes—. Las nuevas elecciones se celebrarán, presumiblemente, el próximo octubre.
“Anuncio mi renuncia como consecuencia de la disolución de la coalición y del bloqueo de los proyectos de ley del Gobierno”, declaró Yatseniuk ante el Parlamento. Poco antes, los grupos Svoboda —nacionalistas radicales— y UDAR —del alcalde de Kiev y exboxeador Vitali Klichkó— habían hundido la reforma energética impulsada por el Ejecutivo al negarse a votar. La iniciativa sólo obtuvo el respaldo de 94 votos de los 226 que necesitaba.
El primer ministro explicó que, ante la ruptura de la alianza, tenía dos posibilidades. Una era formar una nueva coalición, pero en ese caso habría tenido que invitar a los comunistas y al Partido de las Regiones, al que pertenecía el defenestrado presidente Víctor Yanukóvich. “Bajo ninguna circunstancia podría hacer eso”, dijo Yatseniuk sobre una posible unión con sus enemigos políticos. El grupo parlamentario comunista fue disuelto este jueves por la presidencia de la Rada Suprema (el Parlamento), y la fiscalía ha abierto 308 causas criminales contra miembros del PC acusados de apoyar la anexión rusa de Crimea y de crear las autodenominadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk.
La segunda posibilidad, por la que se decantó Yatseniuk, era dimitir.
El presidente del Parlamento, Alexandr Turchínov, propuso a Svoboda y UDAR que presenten la candidatura de un primer ministro técnico que deberá encabezar el gabinete de ministros hasta que se celebren elecciones legislativas anticipadas y se pueda formar una nueva coalición gubernamental.
Al presidente Petró Poroshenko se le presenta así la oportunidad de obtener un grupo que le sea fiel en el Parlamento —cuya composición actual es herencia de la era Yanukóvich—. Su problema es que no tiene todavía su propio partido y depende en su política de los que están representados en la Cámara. Ahora deberá aprovechar esta coyuntura y tratar de crear un movimiento que logre obtener una sólida representación parlamentaria.
Hasta ahora, la fuerza con la sartén por el mango era el partido Patria, de la ex primera ministra Yulia Timoshenko: a él pertenecen representantes como Yatseniuk o Turchínov.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.