“Lucharé por Trayvon hasta que me muera”

“Le juré a Trayvon, cuando estaba tendido en su ataúd, que usaría toda mi energía para buscar justicia para él. Voy a luchar por Trayvon hasta que el día que me muera. Y no solo por él, voy a luchar por sus hijos también”. Tracy Martin, padre del adolescente negro asesinado en febrero de 2012 por el vigilante voluntario George Zimmerman, habló así a los cientos de manifestantes reunidos este sábado frente a la Corte Federal de Miami, que le apoyan en su reclamo de justicia y en la petición de que sean reformada la ley que impidió que Zimmerman fuese condenado.

“Quiero que el mundo sepa que Trayvon era mi hijo. Era un niño amado. No hizo nada malo y no vamos a dejar que lo acosen del modo que lo han hecho”, ha dicho Martin, en un emotivo discurso contra el fallo judicial que absolvió a Zimmerman por haber tirado del gatillo, emitido hace una semana por una corte de Sandford, la localidad del centro de Florida, donde murió Trayvon el 26 de febrero de 2012. “La violencia sin sentido es una enfermedad y nosotros como personas tenemos la cura. Solo necesitamos unirnos”, ha agregado el padre de Trayvon, vestido con una camisa blanca, impresa con el rostro de su hijo y tocado con una gorra de los Marlins de Florida, el equipo de beisbol local.

“No soy un sospechoso”, “Yo soy Trayvon Martin”, “Trayvon Martin pudo haber sido tu hijo”, decían los carteles, escritos a mano, que llevaban los manifestantes de Miami que escuchaban al padre de Trayvon. Tracy Martin agradeció su solidaridad y la de las miles de personas que al mismo tiempo se reunieron en otras 99 ciudades de Estados Unidos, bajo la misma consigna: “Justicia por Trayvon”. “Me siento conmovido. Esto solo muestra el amor y apoyo que nuestra familia y amigos en Miami y a lo largo de todo el país. Estamos enviando un mensaje a la nación. No nos vamos a quedar sentados, esperando que maten a nuestros niños sin decir nada al respecto”, ha señalado Martin.

Además de solicitar al Departamento de Justicia que abra un proceso contra George Zimmerman por violación de derechos civiles, la protesta buscaba presionar al gobernador de Florida, Rick Scott y a los legisladores del Estado, para que promuevan una reforma de la ley “Quieto o disparo” (Stand Your Ground, por su nombre en inglés) que hizo posible que Zimmerman no fuese condenado por el asesinato de Trayvon, bajo el argumento de que había actuado en defensa propia.

Esta norma, vigente en el Estado desde 2005, admite que los ciudadanos hagan “uso razonable de la fuerza” para defenderse de una situación peligrosa o cuando sientan que su vida corre peligro.

Según el jurado que evaluó el caso, eso fue lo que sintió el vigilante voluntario Zimmerman después de perseguir a Trayvon Martin pese a las recomendaciones de la policía, tras enfrentarse con Trayvon a golpes y segundos antes de disparar contra su pecho: que su vida corría peligro. El mismo argumento de defensa propia no fue considerado al evaluar la reacción de Trayvon, quien iba camino a casa cuando los hechos ocurrieron, desarmado, con una lata de té helado y una bolsa de caramelos en el bolsillo. “Estamos tratando de cambiar las leyes para que esto no ocurra de nuevo, nunca más”, ha dicho el reverendo Al Sharpton, líder de la Red Acción Nacional, la organización que convocado a los ciudadanos de Estados Unidos a movilizarse para pedir justicia para Trayvon.