El diputado brasileño condenado a cárcel y huido se entrega

El diputado federal Natan Donadon, el primer miembro del Congreso brasileño en activo condenado a cárcel por corrupción en los últimos 25 años, se ha entregado este viernes a la Policía Federal en Brasilia después de estar desaparecido. Donadon es miembro del PMDB, que forma parte de la coalición que apoya al Gobierno de Dilma Rousseff. La policía había intentado en vano localizarlo, tanto en Brasilia como en el Estado amazónico de Rondonia, de donde es diputado. Finalmente, se ha entregado en una parada de autobús, donde firmó el mandato de prisión. Ahora, tras algunos exámenes, permanecerá detenido hasta ser transferido a una prisión. 

Tras ser condenado a 13 años de cárcel por formación de organización criminal, malversación de caudales públicos, y por haberse apoderado de ocho millones de reales (3,6 millones de dólares) de dinero público, Donadon ha sido expulsado del partido. El abogado del diputado, Nabor Bulhões, había asegurado que su cliente se entregaría voluntariamente a la policía una vez se hubiera “preparado psicológicamente para la cárcel”.

La denuncia contra el diputado viene de 2002. Al ser aforado, el proceso pasó al Tribunal Supremo Federal, que lo condenó en 2010. La defensa recurrió dos veces la sentencia. Solo ahora, bajo la presión de la calle cuya ira se concentra cada día más sobre la corrupción política, el Supremo decretó su prisión.

Ahora la preocupación de los condenados en el proceso del mensalão , que juzga si varios diputados recibieron sobornos por parte del Gobierno de Lula, es que la decisión del Supremo de encarcelar al diputado sin examinar más recursos que los de los abogados pueda repercutir sobre ellos.

De hecho, el Fiscal General de la República, Roberto Gurgel, ya se ha manifestado a favor de acelerar el fin del juicio del mensalão, que los abogados de los ya condenados pretenden alargar hasta que prescriban los crímenes imputados a políticos y banqueros.

También el Presidente del Supremo, Joaquim Barbosa, que fue el juez instructor del mensalão, ha decidido que el 15 de agosto, después de las vacaciones de invierno, piensa retomar el polémico proceso. Y los expertos políticos no dudan de que si para entonces siguen vivas las manifestaciones de protesta en la calle, los magistrados no harán nada para ayudar a los reos a salvarse de la cárcel.

El diputado tendrá que afrontar un proceso en el Congreso que deberá decidir si anula también su mandato electoral. Se trata de un tema muy polémico que ya enfrentó durante el mensalão al Supremo con el Congreso sobre quién tiene la jurisdicción para quitarle el escaño a un diputado condenado a la cárcel, si la justicia o el poder legislativo.