Corea del Norte celebra el día de su fundador en plena crisis nuclear
Se teme que Pyongyang lance un misil de medio alcance como nueva muestra de fuerza
Corea del Norte ha celebrado este lunes el 101 aniversario del nacimiento de Kim Il-sung, fundador del país y abuelo del actual líder, Kim Jong-un, en medio de una de las peores crisis que atraviesa la península coreana desde el fin de la guerra de Corea (1950-1953). Los fastos se iniciaron durante la noche, cuando Kim Jong-un y otros altos líderes acudieron al mausoleo Kumsusan en la capital, Pyongyang, para rendir tributo a Kim Il-sung, el llamado Gran Líder y presidente eterno. El edificio, que en su día sirvió como residencia oficial de Kim Il-sung, ha sido renovado completamente y ha abierto, hoy lunes, las puertas al público. En él, reposan los cuerpos embalsamados de Kim Il-sung y de su hijo, Kim Jong-il, padre del actual dirigente.
Kim Jong-un, acompañado por miembros de la elite militar, ha visitado el mausoleo para ofrecer "un gran homenaje y la más humilde reverencia" a su abuelo, según la agencia oficial norcoreana KCNA. El tercero de la dinastía Kim en dirigir el país y altos mandos militares han presentado cestas de flores, en nombre de las principales instituciones del país con cintas cuyo mensaje rezaba "Los grandes camaradas Kim Il-sung y Kim Jong-un siempre estarán con nosotros", según KCNA.
El 15 de abril —Día del Sol— es la principal festividad en Corea del Norte, y este año había provocado muchas expectativas porque se esperaba que el régimen disparara un misil de alcance medio para enaltecer la imagen del joven Kim Jong-un, que accedió a poder tras la muerte de su padre en diciembre de 2011, y forzar a Estados Unidos y Corea del Sur a negociar la concesión de ayudas y el establecimiento de relaciones. Ha habido un festival de flores, pero no el disparo del misil esperado.
El 13 de abril del año pasado, Pyongyang realizó la prueba —finamente fallida— de un cohete, que, según dijo, estaba destinado a lanzar un satélite. Washington y sus aliados afirmaron que se trató del intento disfrazado de probar un misil balístico intercontinental.
La celebración ha coincidido este año con el cierre del viaje de cuatro días que ha efectuado el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, a Asia, en el que ha logrado el compromiso de Pekín de impulsar la desnuclearización de la península coreana.
Este lunes marca el inicio oficial del nuevo año según el calendario juche —nombre de la ideología de autosuficiencia impulsada por Kim Il-sung—, que comienza el día del nacimiento de Kim Il-sung en 1912. Pero, a diferencia de 2012, cundo fue el 100 aniversario, no hay previstas grandes paradas militares durante la semana.
Aunque el Norte no ha llevado a cabo, de momento, el lanzamiento del misil, la tensión en la península sigue viva, ya que podría ocurrir en los próximos días. Pyongyang rechazó el domingo la propuesta de Corea del Sur de resolver la crisis mediante el diálogo; dijo que no tiene intención de sentarse a negociar con Seúl mientras no abandone su política de confrontación. El Gobierno del Sur ha calificado hoy la decisión norcoreana de “muy lamentable”.
Pyongyang ha amenazado durante semanas con atacar a Estados Unidos y Corea del Sur, en respuesta a las maniobras conjuntas que están llevando a cabo en la región, y a las sanciones que le impuso la ONU tras lanzar un cohete en diciembre y ejecutar una prueba atómica en febrero. El ministro de Defensa surcoreano, Kim Kwan-jin, ha asegurado hoy que el Norte parece estar aún listo para disparar un misil desde su costa oriental, y ha advertido que la península podría entrar en una crisis de misiles prolongada, en función de las circunstancias políticas y diplomáticas.
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