Djotodia gobernará por decreto durante tres años en República Centroafricana
El nuevo presidente suspende la Constitución, disuelve el Parlamento y aprueba un toque de queda para intentar impedir los pillajes en Bangui
Michel Djotodia, el líder rebelde de la coalición Seleka autoproclamado este fin de semana nuevo presidente de República Centroafricana, ha mostrado ya sus primeras cartas. De momento, ha suspendido la Constitución, ha disuelto el Parlamento y ha anunciado un largo periodo de transición de tres años. Durante este tiempo gobernará por decreto y después habrá elecciones libres y transparentes, según ha asegurado en un mensaje a los medios de comunicación. Junto a él estará, como primer ministro, Nicolas Tiangaye, un opositor que ya ocupaba este puesto tras la creación de un gobierno de unidad nacional el pasado mes de enero.
El golpe de Estado que ha depuesto a François Bozizé, refugiado por ahora en Yaundé, la capital camerunesa, parece ya irreversible. En el interior, la preocupación se centra en detener los pillajes y robos que han sacudido a Bangui, la capital centroafricana, durante dos días. Mientras, en el exterior, las lógicas condenas iniciales han sido contundentes hasta el límite de lo razonable porque todo el mundo parece dispuesto a aceptar, de facto, la caída de Bozizé. El lunes, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas pidió el inmediato retorno al orden constitucional, pero no planteó siquiera posibles sanciones contra los rebeldes o ningún tipo de intervención militar, como sí ha ocurrido en otros casos recientes como Malí o la RDC.
El “nuevo presidente” de República Centroafricana, como lo calificó el representante francés en Naciones Unidas, se mostró todo lo conciliador que pudo en su intervención mediática de este lunes por la noche, insistiendo en la idea de que no habrá caza de brujas que afecte a los dirigentes del régimen anterior y de que necesita la colaboración “de todos los centroafricanos” en esta nueva etapa. Sin embargo, el anuncio de que la transición durará tres años “respetando los acuerdos de paz de Libreville” durante los cuales gobernará sin poder legislativo en plaza, vía decreto, no ha sentado bien ni siquiera entre una parte de sus socios de Seleka.
Entre sus primeros objetivos, “restaurar la paz y la seguridad, reorganizar las fuerzas de Defensa y seguridad, reorganizar la administración territorial y continuar con el proceso de desarme, desmovilización y reintegración” de los rebeldes. Para cumplir el primero de sus objetivos y poner fin a los pillajes de los últimos días, patrullas conjuntas formadas por miembros de Seleka y de la Fuerza Multinacional de África Central (Fomac) han comenzado ya a vigilar las calles de Bangui. Asimismo, Djotodia ha anunciado la aprobación de un toque de queda entre las 19.00 y las 6.00 horas.
Un histórico líder rebelde
Nacido en 1949 en la ciudad de Vakaga, al noreste del país, Michel Djotodia intentó en dos ocasiones acceder al Parlamento por la vía de las urnas, pero no tuvo éxito.
Tras ser nombrado cónsul de la República Centroafricana en Nyala (Sudán), donde entró en contacto con los rebeldes chadianos, Djotodia fundó la Unión de Fuerzas Democráticas por la Unión (UFDR).
Este grupo armado lanzó un ataque en 2006 la ciudad de Birao y la República Centroafricana aprobó entonces una orden de arresto internacional en su contra, lo que le forzó a exiliarse en Benín. Pese a ello, fue detenido y permaneció en prisión hasta 2008, año en que salió de la cárcel y, al mismo tiempo, desapareció de la escena pública.
El pasado mes de diciembre, cuando la coalición Seleka volvió a lanzar una ofensiva contra el presidente Bozizé, Djotodia reapareció al frente de su grupo armado. Los acuerdos de paz de Libreville, firmados el 10 de enero pasado, lo elevaron a la posición de viceprimer ministro y ministro de Defensa del Gobierno de unidad nacional.
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