Para que engañar, Ignatieff no gusta en el mundillo nacionalista. Este político e intelectual canadiense es uno de los pensadores contemporáneos que más ha estudiado el fenómeno nacionalista, con frecuencia sobre el terreno, y sus conclusiones no suelen tener muy buena acogida entre los intelectuales nacionalistas. “Lo que está mal en el mundo no es el nacionalismo”, ha escrito. Y añade: “Todo pueblo debe tener un hogar, toda necesidad de este tipo debe ser atendida. Lo que está mal es el tipo de nación, el tipo de hogar que los nacionalistas quieren crear y los medios que utilizan para lograrlo”. Su caracterización del nacionalismo como ‘narcisismo de las pequeñas diferencias’ molesta especialmente a quienes convierten los hechos diferenciales en una ideología y en la base de una política.
Segunda parte. “No se puede retener a una persona en la casa si lo que quiere es irse. La única solución es celebrar un referéndum y las reglas son éstas: (…) preguntas claras, resultados claros, sin secesión unilateral, negociamos (…) Déjeme ser claro: espero que no lleguen a ello. No es una opción feliz, sino muy dolorosa. Así que no lo hagan a menos que tengan que hacerlo. Pero no pueden pretender que pueden mantener a un pueblo en un país contra su voluntad. Antes o después no funcionará. Así que creo que, antes o después el referéndum deberá estar sobre la mesa en Cataluña”. Final del partido: dos a uno en favor del derecho a decidir.
Colofón para casticistas españoles y catalanes: “Esto no es un problema solo español. Es un problema europeo e internacional. Todos los estados modernos son multinacionales y no solo multiétnicos. Así que España no tiene un problema que nadie más sufre, sino que tiene el problema que tienen todos”. El problema es de todos y la decisión al final también es la misma: nada de autodeterminación de los pueblos o de derecho colectivo a decidir sino lisa y llanamente de aplicación del principio democrático.
(Fuentes: la primera cita es de ‘sangre y pertenencia. Viajes al nuevo nacionalismo’, El Hombre del tres; y la segunda de El Mundo, 1 de diciembre de 2012)
Comentarios
Hay que preguntarle al canadiense Ignatieff qué opina de la independencia de la provincia canadiense de Quebec, La población y la cultura de ese territorio son de origen francés, anexionado a Inglaterra después de una guerra de conquista por el dominio de los territorios situados al norte de los grandes lagos. La historia de Cataluña es muy distinta. Formó parte del Reino de Aragón que se unió a Castilla (por un pacto dinástico) para formar elReino de España. Luego, hay que decirle a ese enterado que estudie y lea correctamente la historia y no la interprete a su antojo.
Nación sin estado, estado sin nación. Cataluña es lo primero. Es nación pero no tiene estado propio. España, en sí, ¿es nación o multinación? ¿Se puede ser multinación sin ser nación, o mejor, se puede ser nación siendo multinación? Cuánto rollo para justificar que no se vive cómodamente y de ahí las desavenencias. Como en los matrimonios, hay que llevarse bien, juntarse para lo que es necesario y separarse para lo que no lo es, y sobre todo, respetarse, base esencial de la convivencia. Que siempre es igual, nos líamos a patadas para separarnos para a continuación sellar grandes acuerdos entre abrazos. Es condición sine qua non para establecer lazos haberlos roto antes, según parece para algunos.
"El que després serà història comença cada dia, un dimecres qualsevol d'un any qualsevol.""Lo que después sera historia empieza cada día, un miércoles cualquiera de un año cualquiera."Josep Maria Espinàs
"No veo ninguna razón por la que el pueblo catalán no pueda tener una identidad nacional fuerte dentro del estado español” Hay una de muy poderosa: el estado español no quiere. Quizá para algunos, como el Sr. Bassets, prefieran ignorar esta circunstancia por deshonestidad o ceguera, pero la verdad es la que es. Quizá Ignatieff piensa que todos los paises del mundo son como Canadá.
Ramón, Catalunya nunca formó parte del Reino de Aragón. Me temo que sufres la típica deformación de la historia que hacen los nacionalistas españoles, supongo que como parte de su proceso de españolización y adoctrinación en la enseñanza. Te sugiero consultes algún libro de historia, y te fijes en la distinción entre "reino" y "corona".Lo deliciosamente irónico es que alguien como Ramón, que muestra ese desconocimiento sobre la historia, encima presuma de "decirle a ese enterado que estudie y lea correctamente la historia y no la interprete a su antojo". ¿No es divertido?
Es curioso que el sr. Bassets diga que Ignatieff no gusta en "el mundillo nacionalista" (supongo que el "mundillo de los nacionalistas españoles que se autoproclaman nonacionalistas porque queda más guays" sí que tiene predicamento). Y es muy curioso porque las conclusiones de Ignatieff que aquí presenta el sr. Bassets son las mismas que defienden los que el sr. Bassets tacha de "nacionalistas", es decir, los soberanistas catalanes.1- Catalunya es una nación.2- No es obligatorio que Catalunya tenga un estado.3- Los catalanes tienen derecho a decidir democráticamente su futuro . En el punto 3 resulta divertida la pirueta de Bassets, que prefiera llamarlo "principio democrático" en lugar de "derecho a decidir". Más divertida aún cuando el propio Bassets dice " Final del partido: dos a uno en favor del derecho a decidir." ¿Se aclara? Me temo que la evidencia, que Ignatieff dice que los catalanes deben poder decidir sobre su futuro, ha hecho que el sr. Bassets se trague, aún sin querer, su oposición a aceptar el derecho de autodeterminación de los catalanes.Por último, el punto 2, que Bassets considera que es contrario a los nacionalistas catalanes, es algo que los nacionalistas no rechazan. Catalunya no tiene ninguna obligación de tener estado propio. Lo que tiene es la necesidad de tenerlo, dado que el estado español es hostil a los intereses y aspiraiciones de los catalanes. Ignatieff dice "No veo ninguna razón por la que el pueblo catalán no pueda tener una identidad nacional fuerte dentro del estado español". Millones de catalanes sí las ven, y muy claramente. Dado que el sr. Ignatieff no expone a qué razones se refiere, no es posible decir si es por falta de información o por un juicio distinto. Pero uno creería que quizás los catalanes saben lo que les conviene a ellos mismos y conocen mejor su propia situación que el sr. Ignatieff.
Todas las regiones poseen hechos diferenciales, pero solo el lugareñismo llevado al extremo puede pretender que, por ser algo distintos, los catalanes tienen que ser un estado. En el mundo actual, la polvareda catalana es un pequeño accidente ibérico. Inentendible, por lo demás, que 7.5 millones de individuos resuelvan creerse de avanzada al echar por la borda el uso del castellano, una poderosa arma de interacción mundial. A propósito, ¿Messi habla catalán?
El análisis de Ignatieff parece impecable pero está lleno de trampas si hacemos un análisis riguroso del mismo, porque me temo que para saber si es realmente correcto hemos de averiguar primero de qué narices está hablando, o por decirlo con claridad, tenemos que hablar de cuál es el "pueblo" al que se refiere, cuál es ese "pueblo" catalán. ¿Cómo se define? ¿Por la lengua? ¿Entonces en el hipotético referéndum deberían votar también los valencianos y los mallorquines que el hablan también el mismo idioma? ¿Y los habitantes del Rosellón y de Alguer? ¿Podrían votar los castellanohablantes de Badalona? Si no es por la lengua, y se define por el sentimiento de pertenencia, ¿quiénes serían ese "pueblo"? ¿Los que se definen como solo catalanes? ¿Los que al menos se definan como catalanes en parte? ¿Hasta qué grado uno debería definirse en parte catalán para pertenecer al "pueblo" catalán? ¿Serían considerados catalanes los que se sienten catalanes pero viven en Valencia o Menorca? ¿Podrían votar estos en el referéndum? Si no es por la lengua ni por el sentimiento de pertenencia ¿Sería el "pueblo" catalán el que vive en la Comunidad Autónoma de Cataluña así definida por el ordenamiento jurídico español? Pero muchos piensan que esta comunidad es parte de España. Entonces, habría que definir antes cuál es el "pueblo" español ¿Cómo lo hacemos? ¿Por la lengua? ¿Por el sentimiento de pertenencia?¿ Por la vecindad administrativa definida por el ordenamiento jurídico español? En fin. La cosa se complica. El análisis de Ignatieff en mi opinión parece impecable desde un punto de vista intelectual pero carece de verdadera virtualidad porque parte de una supuesta realidad que no sabemos qué es y que habría que definir primero para saber si es realmente democrático aquello que propugna o solo hablar por hablar.
A Ramón: Cataluña no formó parte del Reino de Aragón. Formó parte de la Corona de Aragón, que no es lo mismo. Compartió monarquía con el Reino de Valencia, el Reino de Aragón, el Reino de Sicilia, etc. Y tenía leyes propias (las Constituciones Catalanas, que el rey debía respetar) y separadas del resto de reinos, dictadas por las Cortes Catalanas, sin cuya aprobación el monarca no podía hacer ley alguna. Además, el soberano de Cataluña (el detentor del título de Conde de Barcelona) debía jurar dichas Constituciones para ser nombrado príncipe.No vaya de enterado, lea correctamente la historia y no la interprete a su antojo.
Pepsi lo ha dicho mejor que yo, con una concisión admirable. ¿Razones para que el pueblo catalán no pueda tener una identidad nacional fuerte dentro del estado español? Una: España (ni el estado español ni el pueblo español) no quiere. Ha hecho todo lo posible para impedirlo, sigue haciéndolo (Wert oportunamente nos ha dado otro ejemplo, uno de tantos), y todo hace prever que seguirá haciéndolo, sea con el PP sea con el PSOE (de Bono, Ibarra, Fernández Vera, Guerra, Leguina, Simancas...), que en eso coinciden plenamente en el fondo y sólo difieren levemente en las formas.De momento no lo ha conseguido, pero muchos catalanes han decidido que no vale la pena seguir luchando para que cambie de actitud, y que hay que elegir entre rendirse y resignarse a ser "españoles del noreste", o abandonar esa España que se niega a aceptar a los catalanes como tales.Como bien dice Pepsi, quizás "algunos, como el Sr. Bassets, prefieran ignorar esta circunstancia por deshonestidad o ceguera". Pero cada vez más catalanes lo ven cada vez más claro. Probablemente Ignatieff, si lo mirara con más detalle y atención, viera lo mismo. Aunque no le guste al sr. Bassets.
Entra tú RAMON, que a mí me da miedo. Qué nivelazo de opiniones y argumentaciones. A ver si en el siguiente post puedo meter baza sin que se note tanto mi ignorancia.
A los enteraditos de Historia, les aclaro que el vocablo Corona corresponde a un Rey, es decir, a un Reino, y no a ningún otro título dinástico. (Príncipe, Duque, Marqués, Conde, Barón), etc). Es mas se aplica también a los Emperadores.
En cualquier caso, ellos se quieren ir. O al menos una buena cantidad de ellos (o eso nos dicen)De todo lo que dice Ignatieff, lo que más acertado me parece es lo último que dice sobre las separaciones : "...no es una opción feliz, sino muy dolorosa". No lo digo por lo económico, sino porque como ya hemos comprobado con Portugal, lo sentimental se vuelve añejo y distante. Entre Portugal y España a pesar de lo ventajoso que sería una mejor coordinación de los transportes para el comercio interno, no se hace... cada uno irá a su bola, me temo. Los vascos tienen su concierto, y contemplan la independencia con mucha calma (están curados de espanto con el tema de ETA, a la espera de ver si Bildu demuestra ser un partido capaz de gestionar a largo plazo, cosa en la que el PNV si tiene experiencia). Encima, cada vez más me está dando la impresión de que al usar la palabra "Los catalanes" se cree que son un colectivo homogéneo... y no lo son, del mismo modo que "Los españoles" tampoco lo son. Y entre dimes y diretes, la gente de a pie, sufre en este país porque no se abordan problemas mucho más urgentes... problemas que los propios nacionalistas de uno y otro bando hacen cosa ligera o usan como armas arrojadizas.
“Esto no es un problema solo español. Es un problema europeo e internacional". Quiere ello decir que Ignatieff sí consideraría el, yo que sé cómo llamarlo, affaire catalán como asunto susceptible de un blog de temas internacionales.
A ver si va a resultar que las guerras civiles son también conflictos intestinos a tratar en exclusiva en foros de índole doméstica.
Que una persona haya estudiado mucho una cosa no implica necesariamente que la entienda. A veces, como en este caso, hacer un análisis, una interpretación de un fenómeno sencillo desde una perspectiva demasiado intelectual solo contribuye a crear confusión. Es el caso de su intelectual canadiense, un completo desconocido para mí, observa e interpreta el fenómeno del nacionalismo catalán desde una perspectiva demasiado intelectual.El nacionalismo catalán ha sido históricamente mayoritariamente burgués y basado en razones económicas. Desconozco si ha cambiado en los últimos días.Lo importante no es si Cataluña debe o no ser un Estado por razones históricas e identitarias, sino la respuestas a preguntas como : ¿Quiere la mayoría del pueblo catalán tener un Estado propio? , ¿Necesita el pueblo catalán tener un Estado propio?, ¿Por qué? , ¿Par que?, y sobre todo ¿Esta el pueblo catalán dispuesto a hacer el esfuerzo necesario par convertirse en una Estado independiente?.
Le dan ustedes muchas vueltas a algo muy simple. Hay aún las dos Españas de Machado, una preponderante y peleona, imperial y con solera, que no quiere cambiar. la otra tímida y precavida que no puede empezar. Y los catalanes van haciendo, y van sufriendo esto que no avanza, tanto como todos los demás españoles. La diferencia está en que ellos ya no lo toleran más.
Ramón, el vocablo "corona" corresponde a un rey, pero no necesariamente a un único reino, sino a todos los reinos de los que el rey fuera soberano. Insisto, consulta la diferencia entre Corona y Reino, "enteradito". O sigue con tu "sostenella y no enmendalla" si prefieres seguir quedando en ridículo, claro. Y de paso se lo explicas a Ciro, que él al menos admite su ignorancia (aunque pretenda hacerlo irónicamente, y fracase).
ECO, que un intelectual contemple las cosas desde una perspectiva intelectual no es muy sorprendente, ¿no? ;-)Dices, "El nacionalismo catalán ha sido históricamente mayoritariamente burgués y basado en razones económicas. Desconozco si ha cambiado en los últimos días.". Tú lo has dicho, desconoces. Pero no de los últimos días, sino de bastantes décadas. Primero, el nacimiento del nacionalismo como movimiento sí que fue burgués, pero no económico, cultural y sentimental (romántico). Y posteriormente, desde ERC hasta las actuales CUP, el catalanismo ha sido mayoritariamente de izquierdas, también con un amplio componente burgués (aunque no de la alta burguesía, siempre alineada con el poder español). Igual que el nacionalismo español ha sido tan de izquierdas (véase el PSOE, que tras su victoria en el 82 fue presentado en la prensa extranjera como "jóvenes nacionalistas") como de derechas. El sentir nacional es transversal, la izquierda hace mucho que no es internacionalista, y a la hora de defender los intereses de una nación se apuntan las izquierdas y las derechas por igual.Sobre las preguntas que planteas, son ciertamente pertinentes. Las encuestas y los resultados electorales indican que la respuesta es que sí. La manera de saberlo con seguridad es hacer un referéndum. Que es a lo que se oponen los nacionalistas españoles y a lo que se niegan gobierno y partidos españoles. Otra pregunta pertinente es si los españoles están dispuestos a aceptar la decisión democrática de los catalanes, y si están dispuestos a hacer el esfuerzo para conseguir una buena relación de vecindad, en lugar de una mala relación de convivencia (lo de conseguir una buena relación de convivencia está descartado, por mucho que ahora salgan "federalistas de toda la vida" proclamando las virtudes milagrosas de un federalismo del cuál se habían olvidado durante 35 años).
FUSS.Lo de que lo desconozco lo supone Vd. Y lo de décadas es simplemente mentira, carece de argumentos para defenderlo. El independentismo de izquierdas en Cataluña ha sido siempre minoritario, y en el pasado impulsado y financiado desde el exterior, por partidos de izquierdas de otros países.Los representantes de Cup_Alter todavía no se han enterado de que el Muro de Berlín ha caído dejando al descubierto el total fracaso no solo de las políticas comunistas sino de la ideología comunista totalmente desacreditada por los abusos que sus dirigentes cometieron contra otros lideres y contra muchos ciudadanos en general. Por no entrar a hablar de la economía de los países que han tenido gobiernos comunistas, las cuales quedaron totalmente arruinadas.La ideología de la Cup es una ideología que no tiene futuro en nuestra época, no conozco quienes son sus líderes ni quienes les financian. Son, aunque ideológicamente opuestos, un partido como Ciudadanos, C´s, con muy pocos votos, poca fuerza y muy localizados en Barcelona. Hablemos de cosas serias, el independentismo catalán tiene alguna fuerza porque lo defiende CiU. Las reivindicaciones de Cataluña hasta ayer siempre han estado motivadas por razones económicas. ERC hasta hace dos días gobernaba con un Partido Socialista que lo único que reivindicaba para Cataluña era mas dinero, mas pasta y no mas derechos ni mas libertad para los ciudadanos.
Ignorancia, dame el nombre inexacto de las cosas, de las que son en tanto que no son y de las que no son en tanto que son. Mezcla variada de citas vueltas del revés.
ECO, lo que desconoces lo asumo por lo que muestras aquí en tus escritos. Y lo vuelves a hacer, al negar el papel de ERC en el nacionalismo catalán desde hace décadas. Sin ir más lejos, como gran ganadora de las elecciones de 1931 que llevaron a la II República. Eso no son "unos días", ¿verdad? Lo de la financiación desde el exterior, aparte de que sería interesante ver tus fuentes para ello, es irrelevante para el hecho de que el catalanismo de izquierdas (no sólo ERC, sino otros como el PSUC o el PSC original) ha sido muy importante en Catalunya desde hace décadas, y no sólo el tópico catalanismo burgués que gusta ver desde España.Igual de irrelevante es tu opinión política e ideológica sobre las CUP. Lo relevante es que son otra muestra de ese catalanismo de izquierdas del que tú niegas la existencia. Otro tópico español: "el independentismo catalán tiene alguna fuerza porque lo defiende CiU". Te recuerdo que CiU no ha abrazado (y con reparos) el independentismo hasta después de la manifestación del 11-S. Esa que, aunque guste repetir desde Madrid, no fue organizada por Mas, sino a pesar de Mas CiU tradicionalmente era catalanista y no independentista, y Jordi Pujol se pasó todos sus gobiernos rechazando la independencia. Pero nada, si tú prefieres creerte el tópico de que CiU siempre ha sido independentista en secreto, allá tú y tu desconocimiento. La realidad es que las encuestas hace tiempo que revelan un importante y creciente porcentaje de independentistas, que ya rondaba el 50% antes del 11-S y la "conversión" de CiU."Las reivindicaciones de Cataluña hasta ayer siempre han estado motivadas por razones económicas". ¡Amén! No sólo no das ninguna prueba o razonamiento para ello, sino que argumentas contra toda evidencia. Las reivindicaciones inicialmente eran puramente culturales y lingüísticas, y estas siempre han sido un factor muy importante en el catalanismo. P.e., la defensa de la lengua, que no nace ahora con el Wertismo, sino que ha sido un fundamento del catalanismo desde siempre. Sí, ERC ha gobernado con el PSC, igual que PP y PSOE han gobernado apoyados por CiU y (los segundos) ERC. Dudo que eso haga a PP y PSOE catalanistas. Y ese PSC impulsó un Estatut que, aunque muy limitado, sí suponía un aumento de los derechos y libertades de los catalanes. Que luego los partidos y el estado español se lo cargaran no quita el intento.En fin, que al final te refugias en el tópico del catalanismo burgués sólo preocupado por "la pela", y sin aportar ningún dato ni fundamento para ello, te niegas a ver la evidencia de la profunda implicación de las izquierdas en el catalanismo
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Escribe en EL PAÍS columnas y análisis sobre política, especialmente internacional. Ha escrito, entre otros, ‘El año de la Revolución' (Taurus), sobre las revueltas árabes, ‘La gran vergüenza. Ascenso y caída del mito de Jordi Pujol’ (Península) y un dietario pandémico y confinado con el título de ‘Les ciutats interiors’ (Galaxia Gutemberg).