Un atentado y bombardeos en Damasco fulminan cualquier intento de tregua

Al menos 10 personas han muerto y varias han resultado heridas, entre ellas mujeres y niños, por el estallido de un coche bomba en el barrio damasceno de Yarmana, informó la televisión siria. El canal ha precisado que el "ataque terrorista" se registró cerca de una panadería en la calle Rauda de Yarmana, de mayoría drusa y situado a unos 5 kilómetros al sureste de la capital. El atentado pone la puntilla al último suspiro del alto el fuego pretendido por el enviado de la ONU, Lakhdar Brahimi, para la fiesta del Sacrificio celebrada este fin de semana. Grupos activistas han denunciado además que la aviación siria ha perpetrado desde la pasada madrugada lo que, en su opinión, han sido los bombardeos más fuertes contra la capital siria.

La agencia de noticias oficial siria, Sana, ha subrayado que "grupos terroristas de los alrededores de Damasco siguen violando la tregua e hicieron explotar un coche bomba en Yarmana", que también ocasionó daños materiales en vehículos y tiendas próximas. El estallido fue tan grande que pudo escucharse desde la distancia, ha informado testigos.

Yarmana ha sido blanco de otros ataques, el más grave perpetrado el pasado 28 de agosto, cuando un coche bomba estalló durante la celebración de un funeral de dos supuestos partidarios del régimen y acabó con las vidas de veinte personas.

El atentado de hoy se produce el cuarto y último día de la tregua temporal en Siria con motivo de la fiesta del Sacrificio, en medio de las acusaciones mutuas entre las partes de no haberla respetado. Desde Moscú, el enviado internacional de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Lakhdar Brahimi, lamentó hoy que su propuesta de alto el fuego haya sido ignorada por ambos bandos, aunque mostró su voluntad de poner fin a la violencia. "Lamento profundamente que este llamamiento fuera ignorado, pero esto no minará nuestra firmeza. El pueblo de Siria merece nuestro apoyo", ha afirmado Brahimi en una rueda de prensa.

Mientras, residentes de la capital siria han informado de ataques aéreos durante la madrugada en los distritos de Qaboun, Zamalka e Irbin. "Más de 100 edificios han sido destruidos, algunos reducidos a escombros", ha informado el activista Moaz al Shami, quien además ha señalado que ha sido testigo de tres bombardeos sobre el distrito noreste de Harasta. "Hay barrios enteros desiertos", ha añadido. Según los cálculos del Observatorio Sirio de Derechos Humanos, grupo activista con sede en Londres, alrededor de 32.000 personas han muerto desde el inicio de la revolución, de ellas, 420 desde el pasado viernes, día en el que entraba en vigor la pretendida tregua unilateral.