El régimen intensifica la ofensiva en Alepo y Damasco
La aviación acentúa sus bombardeos en el norte y el oriente del país
Los aviones del régimen de Bachar el Asad no faltan a su cita diaria y casi horaria sobre los enclaves con focos de resistencia rebelde repartidos por todo el país. En una guerra psicológica y de desgaste, las fuerzas del régimen, desafiadas el viernes por las milicias rebeldes en el aeropuerto de Alepo, han apretado el acelerador en la capital económica del país, y golpearon este sábado con armamento pesado varios barrios de la ciudad (Bustan el Qasr, Al Maysar, Al Zabdiya, Al Fardos, Al Sukari...), sin abandonar las posiciones ganadas en el simbólico Saladino, distrito arrasado en el que se vive una lucha encarnizada.
Según la información del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), el Ejército sirio castigó también las localidades controladas por los alzados al norte de Alepo. En las últimas 24 horas, la fuerza aérea siria ha golpeado en Manbaj, donde al menos murieron cinco personas, Anadan y Azaz, ciudad que el pasado miércoles recibió el impacto de dos bombas con un saldo de al menos 40 víctimas mortales. Los cálculos del OSDH hablan de más de un centenar de muertos este sábado en ataques sobre Alepo, Deir el Zor, Idlib y Damasco.
Es en los alrededores de la capital siria donde el régimen está aplicándose con más fuerza en la última semana. El barrio de Al Tal, en el nudo norte de Damasco, es la diana desde hace 72 horas de las bombas y fuego de artillería del régimen. Según informó el activista del OSDH Abu Abdel Rahman, de las calles de Al Tal se rescataron entre 30 o 40 cuerpos. “Todos son hombres y están sin identificar”, señaló el OSDH. Desde que estallase la revolución anti-Asad en marzo de 2011 y según los cálculos de los activistas, más de 23.000 personas han muerto.
El frente de batalla se vio también sacudido por el que se libra en el campo de la propaganda. El Ejército Libre de Siria (ELS) anunció la deserción del vicepresidente, Faruk el Sharaa, noticia que su oficina se encargó de desmentir con un comunicado difundido a través de un canal de televisión. “El señor Sharaa nunca ha pensado en dejar el país”, señaló la nota. El ELS manifestó que el número dos del régimen trató de abandonar, pero falló finalmente en el intento. Otro comunicado del vicepresidente, que en ningún caso apareció en escena, dio la bienvenida al nuevo enviado especial de la ONU, el argelino Lajdar Brahimi.
También en el plano diplomático y según informa Reuters, el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, rechazó en una entrevista con Sky News Arabia la posibilidad de establecer una zona de exclusión aérea en Siria, opción que la secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, sugirió la pasada semana en visita oficial en Turquía.
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