La policía desmantela el campamento de Occupy London

La policía y agentes judiciales han desmantelado esta madrugada, hora local, el campamento de Occupy London, el movimiento gemelo del 15-M que se había establecido desde el pasado 15 de octubre en las inmediaciones de la catedral de San Pablo. El desalojo se ha llevado a cabo sin violencia aunque algunos de los ocupantes han mostrado resistencia a abandonar la zona lo que ha provocado varias detenciones, según algunos medios de comunicación como el británico The Guardian. Veinte personas han sido detenidas. Los momentos de máxima tensión se han vivido cuando algunos manifestantes han montado improvisadas barricadas de madera pero finalmente la situación se ha tranquilizado.

Justo después de la medianoche la policía dio cinco minutos a los acampados para quitar sus tiendas y retirar sus enseres de la zona. La mayoría de las personas que permanecían acampadas obedeció a la orden pero unos 50 o 60 activistas permanecieron en el campamento.

El Gobierno municipal de Londres asegura que cumple las órdenes del Tribunal Superior de Londres, que indicaba que el desalojo de la zona era "legal y justificado". Sin embargo, los miembros del movimiento reivindicaban que la orden del tribunal concierne solo a la retirada de tiendas y equipos pero que conservan el derecho de estar en el lugar.

Cuando se conoció la decisión judicial de hace una semana, las autoridades londinenses lanzaron una especie de ultimatum al campamento. "Esperamos que los manifestantes retiren las tiendas de forma voluntaria. Si no, y condicionado a los procedimientos de apelación, estudiaremos de qué forma podemos aplicar la sentencia", declaraba Stuart Fraser, un alto cargo de la Corporación de la City de Londres.

George Barda, uno de los acampados ha asegurado, en declaraciones recogidas por la BBC, que tenía “emociones encontradas”. “Este no es el principio del fin, sino el fin del principio”, ha asegurado parafraseando unas palabras pronunciadas por Winston Churchill en 1942 tras la batalla de El Alamein.

Tras el desmantelamiento del campamento, sus ocupantes han improvisado una asamblea a la que se han unido cientos de personas que han acudido a la zona. De momento, los organizadores han convocado a través de su cuenta de Twitter una asamblea general para decidir el futuro del movimiento y han anunciado que las acciones no pararán. Además, desde Occupy London han llamdo a concentrarse ante las embajadas británicas de todo el mundo para mostrar el rechazo al desalojo.