“El 'kirchnerismo' es una secta pequeña, votada por muchos”

“El kirchnerismo es una secta pequeña, votada por muchos”. La definición es del líder peronista opositor Eduardo Duhalde, que competirá el próximo día 23 por la presidencia argentina y que no quiere todavía darse por vencido, pese a lo que dicen las encuestas, respecto a lograr quitarle a Cristina Fernández de Kirchner los suficientes votos como para obligarla a acudir a una segunda vuelta.

“Es cierto que la oposición está completamente atomizada. La gente nos ve como una bolsa de gatos, porque realmente somos una bolsa de gatos”, admite. “También es verdad que la presidenta tuvo un excelente resultado en las primarias. Pero hay una gran diferencia entre votar en unas internas y votar realmente en las elecciones presidenciales, donde existen muchos más controles”, se anima, mientras desayuna con un grupo de corresponsales extranjeros.

Duhalde, que cumplió esta semana 70 años, fue ya en una ocasión presidente, entre enero de 2002 y mayo de 2003, en plena gran crisis argentina. Fue el quien dio los primeros pasos para atajar la catástrofe del corralito y quien designó después a Néstor Kirchner, entonces un gobernador poco conocido de una provincia del sur, como candidato peronista. Kirchner no tardó en convertirse en un formidable oponente, que le fue arrebatando el control del justicialismo. Aun así, Duhalde mantiene su carácter de barón peronista, con muchas conexiones en la importante provincia de Buenos Aires. Gracias a ellas consiguió quedar a centésimas (12,12% a 12,20%) del candidato radical en las primarias del pasado mes de agosto.

Faltan quince días para las elecciones de verdad y la campaña no puede ser más aburrida. Hay poca publicidad en las calles y los anuncios de televisión, que, de acuerdo con la nueva ley electoral, han sido cedidos gratuitamente por las diferentes cadenas, no consiguen levantar los ánimos. “La realidad es que en un solo domingo de fútbol, el kirchnerismo hace más publicidad que toda la oposición junta en la campaña”, protesta Duhalde, irritado por el hecho de que los Torneos de Clausura y Apertura (las dos fases de la liga argentina) hayan pasado a denominarse Trofeo Néstor Kirchner y que la publicidad durante los partidos este prácticamente reservada a anuncios oficialistas.

El problema de la inflación

El candidato peronista opositor critica fuertemente que el gobierno de Cristina Fernández no haya empezado a tomar medidas para hacer frente a los coletazos de la crisis internacional. “Este es un modelo agotado, como se agotó el modelo de Menem, solo que todavía no se han dado cuenta, como no se dio cuenta él hasta que estalló la situación”, mantiene Eduardo Duhalde. Admite que Argentina ha experimentado un periodo de crecimiento económico, no conocido hasta ahora, de nueve años consecutivos, pero cree que ese crecimiento se ha producido básicamente gracias al precio de las exportaciones argentinas y no gracias a la mejora del sistema productivo.

“Se ha subvencionado el consumo, no la producción y eso siempre acarrea graves problemas, al igual que una inflación que va del 26 al 30%, muy por encima de la de nuestros vecinos”. Y recomienda a la presidenta que empiece cuanto antes a buscar “una sintonía fina”: “No lo va a tener fácil y debería ir pensando en convocar a los sectores más importantes para concertar algunas medidas que serán necesarias”.

“Lamento decir que no creo que un segundo gobierno de Cristina Fernández de Kirchner pueda ser exitoso. Lo digo porque conozco bien este país y se lo que está pasando”, asegura. Duhalde se ríe de quienes comparan la situación en España con la Argentina de le época de crisis. “Ojala estuviéramos ahora tan mal como algunos dicen que están ellos. Yo no veo allí la pobreza que se ve aquí. Claro que están pasando por muchas dificultades, pero su situación no tiene nada que ver con la nuestra, digamos lo que digamos aquí”.