El Congreso de Honduras liquida las opciones de Zelaya
Una rotunda mayoría vota en contra de la restitución del presidente depuesto.- Los diputados esgrimen la influencia de Hugo Chávez sobre el mandatario
Se acabó. El presidente de Honduras depuesto el pasado 28 de junio ya no tiene ninguna opción de retomar su cargo durante los dos meses que restan hasta que expire su mandato frustrado. De los 128 diputados que integran el Congreso, 111 votaron ayer contra la restitución de Zelaya y sólo 14 a favor. Será el golpista Roberto Micheletti quien ocupe la presidencia del país hasta el próximo 27 de enero. Y a él le sucederá Porfirio Pepe Lobo, el candidato del Partido Nacional que ganó las elecciones del 29 de noviembre sin supervisión de la ONU, ni de la Unión Europea, ni de la Organización de Estados Americanos (OEA). Micheletti declaró ayer que Zelaya es ya parte de la historia y Lobo lo terminó de enterrar diciendo que pertenece al pasado.
Las concentraciones y manifestaciones del Frente de la Resistencia que apoyan a Zelaya en las calles han ido menguando en los últimos cinco meses. Apenas salen ya 200 personas a las calles de Tegucigalpa. Si al principio se opusieron al golpe 24 diputados, ayer sólo lo hicieron 14. Pero desde la embajada de Brasil en Tegucigalpa, en donde se encuentra Zelaya cercado por el Ejército desde hace 75 días, el presidente depuesto reiteró su intención de seguir luchando allí "de forma pacífica por la condena a la dictadura".
Los diputados zelayistas afirmaron que la decisión del Congreso provocará un mayor aislamiento de Honduras. Cuando a Lobo se le preguntó sobre esa cuestión declaró que lo que hagan otros países le importa mucho, pero lo que más le importa es el respaldo a las elecciones que ha dado el mayor socio comercial de Honduras, que es Estados Unidos.
Lobo, un terrateniente de 62 años, casado y padre de 11 hijos procede de Olancho, la misma región que Zelaya. Ambos son amigos desde la infancia. Quienes conocen al presidente electo aseguran que es un centrista al mando de un partido donde abundan las posiciones de ultraderecha. Tras vencer en las elecciones Lobo aseguró que iba a iniciar un proceso de diálogo en el que no iba a "descartar a nadie". Pero las esperanzas se esfumaron ayer para los zelayistas. "Presidente Lobo Sosa, usted es un buen hombre, probablemente bien intencionado. Lamento que tome la Presidencia de la República en estas condiciones", comentó una diputada zelayista. Y un compañero suyo añadió: "Creíamos que la conciliación de la que hablaba Pepe Lobo se plasmaría restituyendo hoy a Zelaya. Pero nos dimos cuenta de que ese discurso de conciliación y diálogo está vacío", declaró un diputado.
La mayoría de los que votaron en contra de la restitución lo hicieron alegando que votaban para "fortalecer la democracia", mencionaron la palabra "patria", aludieron a la "paz" al "progreso" y la "tranquilidad del país" y se felicitaron por la "limpieza" y la "transparencia" de las elecciones del 29 de noviembre.
Del mismo modo que Micheletti siempre esgrimió que Zelaya pretendía perpetuarse en el poder a la manera de su "amigo" Hugo Chávez, ayer la figura del presidente venezolano planeó durante toda la sesión. "En Honduras no aceptamos que venga un Chávez o cualquier otro tirano a darnos órdenes", alegó un diputado. Su compañero Pompeyo Bonilla indicó: "Volver atrás sería aceptar el mandato de Gobierno de países que no son un ejemplo a imitar y que son liderados por un golpista frustrado convertido en un dictador democrático electorero". Otro representante afirmó: "La OEA es un organismo manipulado por Chávez y por Lula y por otros que pretenden darnos lecciones de democracia cuando ellos nunca la han practicado" Y otro: "Esta tierra no es de Chávez ni de Fidel, es de nosotros". Una diputada: "Que no nos pongan una mordaza como en Venezuela". Su compañero Arnaldo Jesús Miranda: "Este país, con este Gobierno, asesorado por Hugo Chávez y los socialistas y los comunistas del mundo, se ha convertido en aeropuertos y pistas en cada cuadra [manzana] donde aterrizan avionetas cargadas de droga".
Quienes se mostraron a favor de la restitución insistieron en que el Congreso no tiene facultades para ratificar a un presidente. El diputado Marvin Ponce razonó: "Aquí hemos escuchado que Zelaya cometió delitos... que no acató la decisión del juez con la Cuarta Urna [la consulta que el presidente promovió para reformar la Constitución en contra de todos los informes jurídicos de las más altas instancias del país]. Y yo pregunto: ¿Un delito se combate con otro delito mayor? Porque el golpe de Estado es el delito mayor que puede cometer un estadista. El presidente electo Porfirio Lobo Sosa planteó que ya no iba a ser conservador el Partido Nacional, que ahora iba a ser humanista y cristiano. ¿Será cristiano y humanista tener al presidente Zelaya encerrado, haberlo sacado de su casa a balazos y llevarlo fuera del país?".
Honduras cerró ayer un capítulo de su historia. Pero la comunidad internacional tendrá que escribir el siguiente.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.