Netanyahu viaja a Europa en plena crisis con la presidencia de la UE
La publicación de un artículo en Suecia provoca un conflicto diplomático con Israel
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu ha comenzado hoy una gira europea poco antes de que Estados Unidos presente su esperado plan para Oriente Próximo y con el conflicto diplomático con Suecia, que preside este semestre la Unión Europea, como telón de fondo. La publicación de un artículo por un periódico sueco en el que se acusa al Ejército israelí de tráfico de órganos palestinos ha desatado una tormenta entre ambos países.
Netanyahu se reunirá primero en Londres con el primer ministro británico, Gordon Brown, y con el enviado especial de EE UU para Oriente Próximo, George Mitchell. Después viajará a Berlín para entrevistarse con la canciller alemana, Angela Merkel. El derechista Bibi Netanyahu ha advertido hoy a sus ministros que no espera avances definitivos de este viaje en relación a las negociaciones con los palestinos. No obstante, anunció que ha habido "progresos". "Nos encontramos ante un intento de minimizar el grado de desacuerdo", ha dicho.
Israel se ha resistido hasta ahora a acatar la exigencia estadounidense de paralizar la construcción en los asentamientos en territorio palestino como condición previa para el inicio de negociaciones. A cambio, Washington pretende convencer a los países árabes de que "normalicen" sus relaciones con el Estado hebreo en cuestiones culturales o con el establecimiento de vuelos comerciales. A pesar de que Israel asegura que las licitaciones de obras en los asentamientos están paralizadas desde hace seis meses, la organización Peace Now contabiliza hasta 600 nuevas estructuras iniciadas este año y explica en un nuevo informe que el Gobierno podría echar mano de planes de construcción ya aprobados sin necesidad de nuevos concursos y que permitirían edificar hasta 40.000 nuevas viviendas. Irán y la expansión israelí en Jerusalén Este son otros de los temas en la agenda que tocará Netanyahu durante su gira.
Con esta visita Israel pretende además reforzar sus relaciones con la UE, debilitadas tras la ofensiva sobre Gaza que se cobró la vida de 1.400 palestinos. Este deseo inicial se ha visto empañado por el conflicto diplomático que enfrenta a Israel y Suecia, el país que preside la Unión. El artículo que acusa al Ejército de traficar con órganos en 1992, publicado por el periódico de mayor tirada sueco, Aftonbladet, y que se fundamenta en el testimonio de una familia palestina ha puesto en pie de guerra al Gobierno israelí. "Antisemita", cómplice con un "libelo de sangre" y "de actuar como durante la Segunda guerra mundial", son sólo algunas de las acusaciones que Israel ha verbalizado contra Suecia. Netanyahu ha exigido a Estocolmo una condena pública del texto, mientras que Interior ha congelado las solicitudes de periodistas suecos para trabajar en Israel. El primer ministro sueco, el conservador Fredrik Reinfeldt, ha defendido hoy la libertad de expresión ante los ataques israelíes sin entrar en el fondo del artículo. "Nadie puede pedir al Gobierno sueco que viole las leyes. Nuestra libertad de expresión es una parte indispensable de la democracia sueca", ha dicho.
La polémica ha copado las páginas de la prensa israelí y se ha puesto en marcha un boicot ciudadano contra empresas suecas como Ikea. El prestigioso analista israelí Nahum Barnea nada a contracorriente en las páginas del Yedioth Ahronoth en las que considera que en lugar de tanto escándalo, el Ejecutivo israelí debería haber llevado al periódico a los tribunales y que la campaña contra Suecia es "un sin sentido peligroso" y demuestra "una vez más que este Gobierno sólo piensa en claves de política interna".
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