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Los médicos aprueban la prisión y el juicio del ex nazi Demjanjuk

"Su estado de salud es bueno y no se corresponde con su edad", señala el informe para que el guardia del campo de exterminio pueda ser juzgado

El presunto criminal nazi John Demjanjuk, deportado este martes a Alemania desde Estados Unidos, puede permanecer en la cárcel dado que su estado de salud no es preocupante, según han dictaminado los médicos que atienden a los reclusos de la prisión muniquesa de Stadelhim. Faltaba solo un informe médico para que Demjajuk, acusado de participar en al menos 29.000 asesinatos en 1943, cuando era esbirro de la SS en el campo de exterminio de Sobibor, en la Polonia ocupada.

"Su estado de salud es bueno y no se corresponde a su edad, sino que resulta mejor aún de lo que se puede esperar de una persona de 89 años", ha señalado el subdirector de la cárcel, Jochen Menzel, en declaraciones a medios alemanes. Menzel ha comentado que su avanzada edad puede hacer que su salud empeore inesperadamente, pero por ahora no hay problema para que soporte su encierro.

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Los médicos han de decidir si se juzga al ex nazi Demjanjuk

Mientras tanto, la fiscalía muniquesa espera tener lista en pocas semanas la acusación formal contra Demjanjuk, apátrida de origen ucraniano.

La justicia alemana tratará de demostrar lo que no logró la israelí veinte años atrás: que Demjanjuk no fue una víctima del nazismo, sino un guarda voluntario que de preso pasó a convertirse en brazo ejecutor del plan de exterminio nazi.

Demjanjuk, también conocido como Iván el Terrible, llegó ayer a Múnich, en un vuelo especial procedente de Cleveland (EE UU), con un médico y un enfermero, y fue trasladado en ambulancia a la prisión provisional de Stadelheim, donde se le realizó un primer examen médico en el que se constató que su estado de salud era estable.

Ahí mismo le fueron leídos los cargos y se le aplicó la orden de ingreso en prisión. Con la entrega a Múnich se abre un nuevo capítulo en la larga trayectoria ante los tribunales de Demjanjuk, quien se libró incluso de una pena de muerte dictada en Israel. En Alemania se verá confrontado al testimonio del que se considera último superviviente entre los presos de Sobibor, Thomas Blatt, de 82 años, llegado asimismo de EE UU para declarar contra el acusado, si se le abre proceso.

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