Un ataque armado mata a diez personas en el noroeste de Pakistán
Las últimas semanas han dejado 60 muertos en los combates entre talibanes afganos y el ejército
Diez personas han muerto en un ataque de un grupo armado contra la casa de un funcionario gubernamental en el Valle del Swat, al noroeste de Pakistán, esta madrugada (hora española). "Los milicianos atacaron la casa con granadas autopropulsadas (RPG)", explicó el agente de policía Snober Khan. Como resultado, han muerto tres miembros de la familia del funcionario y siete guardaespaldas. Según la cadena privada Geo TV, entre las víctimas mortales se encuentra el hermano del diputado de la cámara regional de la Provincia de la Frontera del Noroeste (NWFP) Iqbal Ahmed Khan.
No es la primera vez que esa zona, el área de Kabal, se convierte en escenario de violentos combates. En el mismo sitio donde se ha producido el ataque, perpetrado con un obús, murieron ayer siete civiles al impactar contra sus viviendas fuego de mortero del Ejército. En total, en las Unos 50 talibanes y 10 soldados del ejército paquistaní han muerto en las últimas semanas. Los milicianos penetraron en la zona a finales del año pasado en apoyo de un clérigo local que trataba de imponer la ley islámica. Se trata de una de las zonas del noroeste del país en que las fuerzas de seguridad combaten a las milicias islamistas.
En esta ocasión el ataque ha sido reivindicado por el movimiento Tehrik-e-Taliban Pakistan (TTP), que aglutina a los grupos talibanes paquistaníes. Según un portavoz del TTP, el ataque es una venganza por los civiles muertos en la operación militar en marcha, según la cadena de televisión Geo.
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