El estreno diplomático de la nueva Cuba deja satisfechos a todos

El secretario de Estado del Vaticano, Tarcisio Bertone, salió satisfecho de su entrevista con Raúl Castro. Y el presidente cubano, que se estrenó en política exterior con este encuentro de alto nivel, también. Hubo resultados para ambos. Las nuevas autoridades cubanas recibieron el respaldo diplomático de la Santa Sede, algo importante para La Habana en estos momentos. Y Bertone expresó a Raúl, con "el máximo respeto de la soberanía del país", los temas de su interés, incluida "la preocupación de la Iglesia para con los presos y sus familiares".

Según fuentes diplomáticas, es muy probable que en los próximos días o semanas un número considerable de presos políticos sean puestos en libertad como "gesto humanitario". Antes de concluir su visita de seis días a la isla, Bertone leyó una declaración en el aeropuerto. El cardenal dijo que deseó a Raúl "éxitos" en su "misión al servicio de su país" y que espera que su viaje sirva para dar "un nuevo impulso en el camino de las relaciones entre la Iglesia y el Gobierno de Cuba". "Estas relaciones serán siempre desafiantes, pero también llenas de oportunidades para promover el bien común de los cubanos", aseguró.

El número dos de la Santa Sede fue contundente el lunes en su condena al embargo de EE UU, que calificó de "opresión para el pueblo cubano" y "una violación de la independencia", y aseguró que él mismo ha pedido al Gobierno de Estados Unidos que permita "la reunificación de los familiares en Cuba". La decidida apuesta del Vaticano por el diálogo, en la misma línea que el Gobierno español, es para Cuba razón suficiente para considerar la visita un éxito.

Junto al asunto de las excarcelaciones de presos, siempre polémico, la Iglesia puso encima de la mesa sus reclamaciones históricas, entre ellas el acceso a la educación y a los medios de comunicación. Durante un encuentro con periodistas católicos celebrado el pasado martes, Bertone aseguró que las autoridades cubanas le habían prometido "más apertura en la prensa y en la radio, así como, en casos excepcionales, en la televisión". "Todo comienza siempre con promesas, pero esperamos una apertura", dijo el cardenal.

La próxima cita de Raúl Castro con una personalidad extranjera será el 6 y 7 de marzo con el comisario europeo para el Desarrollo, Louis Michel, que recientemente se declaró "listo para un diálogo constructivo con Raúl Castro". La posibilidad de que el comisario se reúna con representantes de la disidencia durante su viaje a la isla es uno de los asuntos polémicos. El ministro de Asuntos Exteriores español, Miguel Ángel Moratinos, no lo hizo en abril del año pasado. Tampoco lo ha hecho ahora Bertone. Y por ello, ambos han sido criticados por la oposición.