Segunda jornada de caos en el tranporte en Francia

Francia vive hoy a una nueva jornada caótica en el transporte público después de que ayer los sindicatos acordaran prorrogar la huelga en protesta por la reforma de los regímenes especiales de jubilación. No obstante, el conflicto parece entrar en vías de solución tras el paso atrás de los sindicatos, que aceptaron el sistema de negociación del Gobierno y el plazo de un mes ofrecido por el Ejecutivo de Nicolas Sarkozy para lograr un acuerdo con las empresas. Pese a todo, los huelguistas han acordado una nueva jornada de huelga para mañana.

Pese a que las condiciones han mejorado hoy con respecto a la jornada de ayer, en el área de París circula uno de cada tres o cuatro trenes de Metro; los cercanías son los trenes más afectados, algunas líneas no funcionan en absoluto. En lo que depende de la SCNF, la Compañía Nacional de Ferrocarriles, seis de los ocho sindicatos han pedido reconducir la huelga y la dirección de la empresa preveía cierta mejora en el tráfico, con 150 trenes de alta velocidad frente a los 700 que circulan normalmente; 130 nocturnos Corail de los 300 que hay a diario y de dos a tres trenes por hora en el Transilien, así como un Tren Regional de cada tres y 2.000 autobuses suplementarios. El Eurostar a Londres y los Thalys, que unen París con Bruselas, Amsterdam y Colonia, circulan con normalidad. En la Red de Transportes de París (RATP), donde cuatro sindicatos de siete han pedido seguir los paros, la dirección prevé una media de una de cada cuatro líneas.

A pesar de la ligera mejoría, los acceso a París seguían registrando hasta 280 kilómetros de atascos y la llegada a la capital podía demorarse incluso hora y media. En la red de metro, el tiempo medio de espera oscilaba entre 10 a 25 minutos. Y también funciona el 27% de los autobuses y tranvías.

Vías de negociación

La vía de la negociación pareció abrirse un tanto ayer con una oferta del Gobierno que fue aceptada por varios sindicatos, entre ellos el más importante, la CGT. En una carta del ministro de Transporte, Xavier Bertrand, a los sindicatos, les especificaba la hoja de ruta de la negociación, aceptando que sea tripartita (sindicatos, empresas y Gobierno) y empresa por empresa, tal y como pidió una de las principales organizaciones, la CGT. El Gobierno es flexible sobre las modalidades de aplicación de la reforma, pero mantiene como "indiscutible" la medida de elevar de 37,5 a 40 los años de cotización para tener derecho a una pensión completa, para equipararlos al resto de trabajadores. El Gobierno da a los sindicatos y a las empresas un mes para negociar medidas de acompañamiento de la reforma y poner fin a la huelga de transportes.

Pese a que la vía de negociación fue aceptada por algunas centrales sindicales, los dirigentes de los sindicatos convocantes de la huelga se han reunido esta tarde con la presión de sus bases, ya que numerosas asambleas han decidido esta mañana continuar un día más con los paros. Mientras, el primer ministro, François Fillon, ha pedido "responsabilidad" y "el fin de la huelga", tras haber recordado que la CGT, el motor de estas movilizaciones había asumido participar en conversaciones a tres bandas. Además, les ha recordado que la propuesta de aumento del tiempo de cotización cuenta con el apoyo de "una inmensa mayoría de los franceses".

El propio presidente francés, Nicolas Sarkozy, considera que el conflicto "tiene que detenerse lo antes posible" porque "se dan las condiciones" para la negociación. En este contexto, ya han surgido las primeras voces sugiriendo que hay "elementos" para suspender la huelga, como lo hizo en France 3 el secretario general de la CFDT, François Chérèque, tras haber recibido la carta con el método de negociación del ministro de Trabajo. No obstante, los sindicatos decidirán hoy si continúan con la huelga mañana.