Segundo motín en dos días en una cárcel brasileña

Policías antimotines controlaron ayer la segunda rebelión en menos de dos días en un presidio de la ciudad brasileña de Recife (noreste), donde el domingo murió un reo y otros 40 resultaron heridos, 10 de ellos de gravedad, según las autoridades. Unos 100 policías entraron en el presidio Aníbal Bruno, en el oeste de la capital del Estado de Pernambuco y controlaron la segunda rebelión, sin que se registraran de inmediato nuevas víctimas.

Las autoridades penitenciarias de Recife explicaron a medios locales que el segundo motín se desató en el pabellón D, el mismo escenario de los conflictos del domingo.

Unos 2.000 de los 3.900 reclusos exigen desde el domingo mejoras en sus condiciones de prisión y protestan por el traslado de un reo, según las autoridades penitenciarias de Pernambuco.

El primer motín comenzó el domingo, al terminar el horario de visitas, cuando un grupo de presos protestó contra guardias que supuestamente cobraban el equivalente a 21 euros por permitir encuentros reservados de los presos con sus mujeres.

A continuación, los presos incendiaron dos de los 18 pabellones e intentaron tomar rehenes. Unos 240 policías contuvieron el primer motín usando bombas de gases lacrimógenos y disparos al aire.