Parlamentarios bajo sospecha

La polémica saltó en otoño del año pasado. Un programa de humor italiano, Las Hienas, hizo una prueba antidroga a 50 parlamentarios sin que estos lo supieran. El resultado: 16 dieron positivo, 12 por cannabis y 4 por cocaína. Con este caso de trasfondo, más de un centenar de diputados, la mayoría de partidos de derecha, se han sometido hoy a un test antidroga. Con este acto pretenden defender su proyecto de ley, rechazado la semana pasada por la cámara baja, para que los controles antidroga sean obligatorios para todos los diputados.

La iniciativa, calificada de "demagógica" por los grupos de izquierda, ha sido organizada por los Demócrata-cristianos de la UDC (centro derecha). Su secretario nacional, Lorenzo Cesa, ha anunciado que pidió a los cargos electos de su partido que hagan públicos los resultados de las pruebas.

"Es una buena iniciativa. Aquellos que representan a las instituciones tienen que dar ejemplo. Responde también a las campañas de denigración a la que la clase política italiana se ha visto sometida", ha explicado el diputado de Forza Italia, Angelo Santero.

Esta prueba se produce dos días más tarde de la dimisión de un de los diputados de la UDC, Cosimo Mele, que admitió haber pasado una noche con una prostituta de lujo en uno de los mejores hoteles de Roma. Mele, casado y padre de tres hijos, confesó los hechos después de que la agencia de noticias italiana Ansa informara de la hospitalización de una joven que se encontraba indispuesta después de haber pasada una noche "con una parlamentario". No dijo el nombre de su acompañante, pero precisó que "alcohol y cocaína" estuvieron presentes en la velada.

Este caso ha puesto en un aprieto a la UDC, partido próximo a la Iglesia italiana y al Vaticano y que defiende la tradición católica.