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Dos horas tras una pista falsa

La policía empezó a buscar al novio de la primera chica asesinada en Virginia mientras el agresor real deambulaba libremente por el campus

Una pista falsa puede ser la explicación de que Cho Seung-hui deambulara con dos pistolas durante dos horas por la Universidad Politécnica de Virginia después de un primer tiroteo en el que asesinó a dos personas. Según relata hoy el diario The New York Times, tras el primer incidente, los agentes se pusieron a buscar al novio de la primera chica asesinada, que no tenía nada que ver con el asunto.

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Al parecer, tras el primer tiroteo, en el que murieron Emily Jane Hilscher y Ryan Clark y que se produjo en una de las residencias del campus, la policía emitió una orden de busca contra Karl D. Thornhill, novio de Emily y estudiante de la cercana universidad de Ratford. Alguien había dicho que este chico tenía armas y que realizaba prácticas de tiro y la policía creyó que tenía que ver con el suceso. Los agentes le localizaron y comenzaron a interrogarle justo en el momento en que Seung desencadenaba el segundo tiroteo, el más desenfrenado, en la Escuela de Ingeniería, matando a 30 personas. Quedó claro que Thornhill no era el hombre que estaban buscando.

Mientras todo esto ocurría, Seung, armado con dos pistolas, deambuló por el campus sin que nadie le molestase. La policía defiende su actuación en el suceso, pese a esas dos horas en las que el agresor paseó a sus anchas y pese a que la Universidad trató de avisar a sus alumnos de lo que ocurría cuando todo había pasado . John W. Marshall, el secretario de seguridad pública del Estado de Virginia, ha dicho que Charles W. Steger, el presidente de la Universidad y Wendell Flinchum, el jefe de la policía del campus, "tomaron las decisiones correctas basadas en la mejor información de que disponían en el momento". Después de los tiroteos, con Seung muerto, la policía emitió otra orden de búsqueda, esta vez ya contra el estudiante norcoreano, pero ya era tarde.

Paralelamente, se van conociendo más detalles sobre la personalidad perturbada de Seung. Así, se ha conocido que un profesor suyo de Literatura creativa advirtió ya en 2005 a las autoridades de la Universidad sobre el comportamiento y la personalidad de su alumno por las redacciones que escribía, llenas de ira, odio, blasfemias y violencia. Según cuenta Lucinda Roy, antigua jefa del Departamento de Inglés de la Universidad, un profesor del chico le remitió alguno de sus textos a finales de 2005 y ella, al leerlos, quedó tan estupefacta que decidió mantener un cara a cara con Seung. Además, envió estos escritos a la policía del campus, al servicio de orientación del campus, pero no se hizo nada. Incluso ella se ofreció a acompañarle a este servicio, pero él se negó. Algunos alumnos también se quejaron porque Seung tomaba fotos inapropiadas de las alumnas por debajo de los pupitres.

Finalmente, los investigadores están analizando varias amenazas de bomba recibidas en el campus recientemente por si fueron enviadas por Seung.

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