Mueren cuatro soldados británicos y su intérprete tras la explosión de una bomba en Irak
Un helicóptero estadounidense se estrella tras ser disparado en territorio suní al sur de Bagdad
Cuatro soldados británicos y su intérprete kuwaití murieron ayer por la explosión de una bomba al sur de Irak, según ha informado hoy el Ministerio de Defensa británico.
Los cuatro militares y el intérprete civil viajaban en un vehículo que estalló tras pisar una bomba enterrada en la carretera. "Con gran pesar podemos confirmar que cuatro soldados británicos y un intérprete civil murieron esta mañana por un ataque con bomba contra un (vehículo) patrulla en una carretera al oeste de Basora", indicó una portavoz de Defensa. Con estas víctimas son ya seis los soldados británicos fallecidos esta semana en Irak.
Según responsables de la Policía iraquí en Basora, los soldados acababan de detener al teniente Haidar al Yazaeri, de la comandancia contra el crimen del Ministerio del Interior, y regresaban a su base cuando se produjo la explosión y la posterior emboscada, en la que los atacantes dispararon desde tres direcciones. El enfrentamiento causó numerosos heridos, indicaron las mismas fuentes sin precisar una cantidad.
El pasado 12 de noviembre, cuatro soldados británicos murieron en un ataque contra una patrulla naval de la Fuerza Multinacional en el canal fluvial de Shatt Al-Arab, en Basora. Tres británicos perdieron la vida el 30 de enero de 2006 tras estrellarse un avión de transporte Hércules al norte de Bagdad.
Abatido un helicóptero de EE UU
No es el único ataque que han recibido las fuerzas extranjeras desplegadas en el país mesopotámico. Un helicóptero militar estadounidense se ha estrellado tras los disparos de hombres armados en territorio suní al sur de Bagdad. El Ejército estadounidense ha confirmado que el aparato "ha sido abatido o víctima de una avería" y ha informado de que sus cuatro ocupantes se encuentran heridos.
Según han informado fuentes iraquíes, varios hombres abrieron fuego contra un helicóptero Black Hawk a primera hora de la mañana, cuando sobrevolaba la ciudad de Latifiyah, 30 kilómetros al sur de la capital iraquí. El aparato se vino abajo y las fuerzas estadounidenses acordonaron la zona.
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