Doce muertos y 200.000 evacuados por las inundaciones en Pensilvania

Las autoridades de Pensilvania iniciaron anoche la evacuación de 200.000 personas de Wilkes-Barre y de otras áreas cercanas al río Susquehanna debido a las inundaciones provocadas por las intensas lluvias torrenciales de los últimos días, según han anunciado funcionarios de la ciudad estadounidense. Al menos 12 personas han muerto ya en la costa atlántica de Estados Unidos a causa de las lluvias, que mantienen en alerta máxima a las autoridades y que han provocado también masivos desalojos en los estados de Nueva Jersey, Nueva York y Maryland.

La zona de Wilkes-Barre, situada en el noreste del Estado de Pensilvania, fue devastada por el huracán Agnes en 1972 y desde entonces unos diques de contención la protegen de nuevas crecidas. Sin embargo, tras las lluvias torrenciales de los últimos días, el Susquehanna no ha parado de crecer y las autoridades temen que sobrepase los 12 metros de altura de los muros que contienen el río. Por esta razón, ordenaron anoche la evacuación obligatoria. Además de los residentes que están siendo evacuados en Wilkes-Barre, miles de personas han recibido también órdenes de abandonar sus casas en Nueva Jersey, Nueva York y Maryland.

La situación más grave se vive en el condado de Broome, en el Estado de Nueva York, donde han sido desalojadas otras 15.000 personas, según ha explicado un funcionario de este condado en la cadena de televisión CNN. El gobernador de este Estado, George Pataki, declaró la situación de emergencia en diez condados e hizo un llamamiento a la población para que evite en lo posibles los desplazamientos. Ante el posible desbordamiento del río Potomac, que cruza la capital de EE UU, Washington sigue en estado de emergencia, el cual permite al alcalde llamar a las tropas de la Guardia Nacional si se requiere su colaboración, y despeja el camino para suministros de emergencia.

Nuevas víctimas mortales

Mientras, el número de muertos en Maryland, Pensilvania y Nueva York ha crecido a 12 con el hallazgo de los cuerpos de tres desaparecidos. Así, el joven de 15 años murió ahogado en un lago en Pensilvania, y el novio de su madre falleció al intentar rescatarlo, según informaron los servicios de rescate. En el mismo Estado también perdió la vida un hombre en un accidente de tráfico provocado por las lluvias.

Mientras, en Maryland, tres jóvenes murieron la noche del martes en el condado de Frederick, cuando fueron arrastrados en un vehículo en el que descansaban después de haber sido rescatados de su propio automóvil, según dijo el cuerpo de bomberos local. Otros dos camioneros murieron cuando sus vehículos cayeron a una zanja de ocho metros de profundidad y 15 metros de anchura que las aguas habían abierto en la carretera interestatal 88, cerca de Binghamton (Estado de Nueva York), donde también pereció otra persona.

Las últimas víctimas mortales son dos adolescentes fallecidos por la crecida de un arroyo en Maryland y una niña de 8 años arrastrada por las aguas en Virginia. Aunque las lluvias han comenzado a disminuir las zonas más afectadas, la amenaza de inundaciones persiste pues las aguas confluyen y dan lugar a las crecidas en las 24 horas siguientes a las precipitaciones, según los meteorólogos. El Servicio Meteorológico Nacional teme, además, que un frente frío que se desplaza lentamente desencadene hoy más lluvias torrenciales, lo que podría causar nuevas inundaciones.