Confirmado el secuestro de los dos españoles desaparecidos en Panamá

La familia de José Vicente Colastra y su hijo Sergio, quienes desaparecieron el 20 de enero en una zona de Panamá fronteriza con Colombia, ha contactado con los secuestradores, según ha informado una fuente diplomática. Esta misma fuente también ha indicado que, por el momento, ningún grupo en concreto se ha adjudicado la autoría del secuestro ni tampoco se ha solicitado rescate alguno por los dos rehenes.

El embajador especial para la Coordinación de las Relaciones con las Comunidades Españolas en Iberoamérica, Miguel Cortizo, que llegó a Panamá el viernes pasado para dedicarse exclusivamente a este caso junto con las autoridades locales, ha indicado que "este contacto se produjo vía telefónica hace unos cinco días" y que los dos españoles "han sido víctimas de un secuestro (...) por parte de hombres armados" no identificados.

De este modo, desmiente varias informaciones aparecidas en distintos medios locales según las cuales el médico naturista y su hijo fueron secuestrado supuestamente por el Frente 57 de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para ayudar a combatir un brote de malaria entre miembros de ese grupo guerrillero.

Miguel Cortizo ha indicado que él y las personas que le acompañan están en Panamá para hacer el análisis de la información y para reforzar al personal de la embajada, pero que "el tema lo llevan las autoridades panameñas". Cortizo agradeció además, las facilidades que les han ofrecido en Panamá, y señaló que se ha reunido con el vicepresidente primero y ministro de Exteriores panameño, Samuel Lewis Navarro; la viceministra de Gobierno, Olga Golcher, y el director de la Policía Nacional, Rolando Mirones.

Médico y documentalista

José Vicente, médico naturista interesado en la cultura aborigen, se estableció en 1999 en Panamá, donde fundó la organización no gubernamental "Tierra Viva", mientras que su hijo Sergio ha realizado documentales sobre los indios panameños.

José Vicente y Sergio Colastra fueron secuestrados en la ensenada de El Guayabo, en el sector de Jaqué, donde construían un centro de medicina natural y protección ambiental, según versiones de la prensa local basadas en testimonios de habitantes de la zona.