Dimite el líder de los liberal demócratas británicos por sus problemas con el alcohol

Charles Kennedy, el líder del partido liberaldemócrata británico, la tercera fuerza política del país, ha anunciado hoy en una comparecencia ante los medios su dimisión, tras haberse conocido que tiene problemas de adicción al alcohol.

En una declaración en la sede de su partido, en el barrio londinense de Westminster, Kennedy ha afirmado que deja el liderazgo liberal demócrata con "efecto inmediato" tras llegar a la conclusión de que era lo mejor para su organización política. "En todo esto, los intereses de nuestro partido tienen prioridad. Es ahí donde están mis deberes personales, políticos y constitucionales", ha subrayado Kennedy, líder de la formación que más criticó y más se opuso a la invasión aliada en Irak de 2003.

Según ha indicado, su sucesor, al que promete su total respaldo, tiene que ser elegido lo antes posible para concentrarse en los comicios locales que se celebrarán el próximo mes de mayo. El nuevo "número uno", ha añadido, heredará un partido con la mayor representación parlamentaria en ochenta años, 62 diputados.

"Creo que la unidad es aún fundamental para conseguir mayores avances y éxitos", ha puntualizado. Según él, su formación ha contribuido a superar de alguna manera el bipartidismo británico -dominado por laboristas y conservadores- y ahora el Reino Unido tiene tres importantes formaciones políticas. "Creo que es una buena herencia y una gran oportunidad", ha dicho.

Veinticinco de los 62 parlamentarios liberal demócratas querían que Kennedy dimitiera y se negaban a trabajar con él después de que hubiera reconocido que se sometió en los últimos dieciocho meses a un tratamiento para superar el problema de alcohol.