Cientos de peruanos se manifiestan contra la corrupción de Toledo y la impunidad de Fujimori

Varios centenares de peruanos salieron a la calle el martes para participar en una manifestación en el centro de Lima contra la corrupción y la impunidad tanto del actual Gobierno de Alejandro Toledo como del anterior de Alberto Fujimori. Según informa el diario peruano El Comercio, el acto de protesta, de carácter pacífico y apolítico, fue convocado por el ex obispo Luis Bambarén. Muchos de los manifestantes llevaban ropas y guantes blancos como símbolo de pureza y carteles con el lema de "¡Basta ya!", mientras que decenas de personas llegaron con enormes máscaras que caricaturizaban a Toledo y a Fujimori.

Durante sus cuatro años en el poder, el presidente Alejandro Toledo se ha visto salpicado por varios escándalos de corrupción y ha sido acusado de falsificar firmas en el registro de su partido para las elecciones del pasado año 2000. Fujimori, prófugo de la justicia peruana y afincado en Japón desde el año 2001, cuando huyó de Perú, no ha podido ser extraditado a pesar de las incesantes demandas de las autoridades peruanas. "Debemos combatir este virus que crece en el corazón de la gente y llena sus bolsillos. Es la obligación de cada peruano", dijo Bambarén en un discurso que pronunció en frente de las Cortes peruanas, llamadas por los críticos "Palacio de la Injusticia".

19 parientes de Toledo están siendo investigados por corrupción, mientras que uno de sus antiguos ayudantes se encuentra en prisión acusado de sobornar a jueces. A su vez, siete ministros de Toledo abandonaron sus cargos por escándalos de tráfico de influencias. A pesar de las promesas del presidente de "hacerle la guerra" a la corrupción, varios acusados de la era Fujimori han sido liberados por falta de pruebas.

Fujimori está acusado de violar los derechos humanos durante su lucha antiterrorista contra la banda organizada Sendero Luminoso en la década de los noventa. Debido a su nacionalidad japonesa, a la que se acogió al abandonar su cargo, Japón ha rechazado su extradición. Fujimori ha negado todas las acusaciones.

Un sondeo muestra que el 56 por ciento de los residentes en Lima consideran la corrupción como uno de los problemas más serios de la política peruana y se declaran cansados de la impunidad de la que suelen gozar los políticos del país. De las 73 personas juzgadas por corrupción en Perú, 50 se encuentran en arresto domiciliario y se teme que podrían ser fácilmente liberados.