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CRISIS EN BOLIVIA

Miles de personas hacen largas colas en Bolivia para conseguir combustible

El país cuelve paulatinamente a la normalidad con la apertura de la mayoría de la carreteras

Después de 25 días de graves protestas que sumieron al país en el caos y obligaron al cambio de Gobierno, Bolivia comenzó el sábado a volver paulatinamente a la normalidad con la apertura de la mayoría de la carreteras principales y el reabastecimiento de combustibles. La distribución de hidrocarburos se reanudó desde las primeras horas del sábado en la ciudad de El Alto, vecina de La Paz, y se espera el reabastecimiento de combustibles.

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Miles de personas tomaron nuevamente las calles del centro de La Paz, pero esta vez con garrafas de gas en mano para poder conseguir combustible, mientras filas interminables de vehículos aguardaban la llegada de gasolina en las estaciones de servicio. "Hemos tenido que cocinar con leña estos días para poder dar comida a los niños", explicaba una mujer de un barrio pobre que cargó sus recipientes metálicos a la espalda desde el cerro para llegar hasta el centro de la ciudad donde una rebatiña de gente se peleaba por comprar gas.

La estampida a las calles se desató cuando varias emisoras de radio informaron desde la cercana ciudad de El Alto que la planta de hidrocarburos de Senkata, en ese municipio, comenzó a enviar camiones con los carburantes para abastecer a los vecinos del distrito y los de La Paz.

Minutos después, las calles del centro, que habían quedado liberadas de bloqueos campesinos y obreros realizados desde el 16 de mayo hasta el pasado viernes, se colmaron de familias con sus garrafas amarillas. En algunas avenidas, desesperadas amas de casa cortaron el tránsito para que camiones destinados a otros barrios se vieran obligados a vender el producto en su zona. "No vamos a dejar que pasen si no nos venden primero a nosotros", dijo una mujer.

Madera como combustible

En una barrio alejado, la gente se aprovisionó de madera para cocinar de un depósito de pupitres escolares viejos y agotaron la montaña de muebles en desuso. Durante los días de protesta en que se agravó la escasez de combustible, la gente pobre recurrió a la leña para preparar sus alimentos. Las responsables de las empresas distribuidoras de gas indicaron que hasta el domingo terminarán de abastecer los requerimientos de esta ciudad.

Los camiones de gas salieron con custodia policial rumbo a las ciudades, pese a que los dirigentes vecinales y sindicales de El Alto habían señalado que no levantarían los bloqueos que impedían el paso entre esa ciudad y La Paz. Las principales vías que unen a La Paz con el resto del país pasan por El Alto.

Al bloquearse las calles y rutas en esa ciudad, la capital se ve virtualmente asfixiada, como aconteció ahora durante dos semanas. El Alto es una localidad dormitorio de 700.000 habitantes, en la que el 70% se mantiene en situación de desempleo encubierto, pues su principal actividad es la venta callejera de todo tipo de productos.

Un grupo de personas espera la llegada del camión de gas en la autopista que une la ciudad de La Paz con la ciudad de El Alto.
Un grupo de personas espera la llegada del camión de gas en la autopista que une la ciudad de La Paz con la ciudad de El Alto.EFE

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